El gobernador Josh Shapiro afirmó que no cederá ante la violencia tras el incendio provocado en su mansión durante la celebración de Pésaj.
El atacante burló la seguridad y provocó un incendio en la mansión
Durante la madrugada del domingo, un hombre irrumpió en la residencia del gobernador de Pensilvania tras escalar una valla de seguridad metálica. El sujeto, identificado como Cody Balmer, de 38 años, logró ingresar por la fuerza al edificio y provocó un incendio que causó serios daños en una de las principales salas del inmueble.
La familia del gobernador Josh Shapiro, junto a otros invitados, fue evacuada del lugar sin que se reportaran heridos. El incidente ocurrió horas después de la celebración del Séder de Pésaj, en la misma sala que resultó afectada. La policía confirmó que el atacante utilizó un artefacto incendiario de fabricación casera.
Shapiro informó que él, su esposa, sus cuatro hijos, dos perros y otra familia presente fueron despertados alrededor de las 2:00 a.m. por agentes de la policía estatal que alertaron sobre la emergencia. El fuego fue controlado por los bomberos de Harrisburg.
Según el teniente coronel George Bivens, Balmer planeó cuidadosamente el ataque y permaneció dentro de la residencia durante un minuto antes de huir. Las autoridades lograron arrestarlo más tarde ese mismo día.
El gobernador reafirma su compromiso con su fe y con su labor
Horas después del ataque, Shapiro ofreció una conferencia de prensa frente al ala sur de la residencia, donde declaró que no se dejará intimidar por actos de violencia. El gobernador demócrata expresó que seguirá ejerciendo su labor con más fuerza y celebrando su fe con orgullo.
“Me niego a quedar atrapado por la esclavitud que alguien intenta imponerme al atacarnos”, dijo Shapiro. Añadió que el responsable no impedirá que él ni los ciudadanos de Pensilvania practiquen su religión de forma abierta.
El mandatario también condenó la violencia generalizada, sin importar su origen político o religioso, y señaló que este tipo de hechos se está volviendo demasiado frecuente en la sociedad. Afirmó que es inaceptable y que debe cesar.
Durante su intervención, Shapiro reiteró que continuará celebrando el Séder de Pésaj, como lo hizo la noche anterior junto a miembros de la comunidad judía de Harrisburg. Confirmó que el segundo Séder se llevaría a cabo con el mismo orgullo.
Detalles clave del ataque y su impacto en la residencia
- El atacante saltó una valla de 2,1 metros que rodea la mansión del gobernador.
- Cody Balmer enfrenta cargos por intento de asesinato, terrorismo, incendio premeditado agravado y asalto agravado.
- El incendio afectó gravemente una sala utilizada para recepciones y exhibiciones de arte.
- En el interior, se observaban muebles quemados y daños severos en paredes y ventanas.
- El FBI, el Departamento de Justicia y fiscales federales ofrecieron apoyo en la investigación.
La investigación continúa y no se ha revelado un motivo
El coronel Christopher Paris, de la Policía Estatal de Pensilvania, aseguró que la investigación sigue en curso. Aunque no se ha establecido el motivo del ataque, las autoridades no han descartado posibles motivaciones ideológicas o religiosas.
El gobernador Shapiro evitó especular sobre los motivos de Balmer, pero subrayó que la violencia dirigida contra su familia y su comunidad no detendrá su labor. Insistió en que ningún ataque impedirá a los habitantes del estado practicar libremente sus creencias.
La zona sur de la residencia fue acordonada con cinta amarilla, y los investigadores retiraron parte de la valla afectada. Esta fue envuelta en plástico negro y transportada como evidencia para continuar con las pericias.
Shapiro alterna su tiempo entre la residencia oficial, situada junto al río Susquehanna, y su casa en Abington, ubicada a unos 160 kilómetros al este. El día anterior, había compartido en redes sociales una imagen de la mesa del Séder de Pésaj en la mansión.
Reacciones políticas ante el atentado en la residencia estatal
El vicepresidente republicano JD Vance condenó el ataque en redes sociales y expresó su deseo de que el responsable enfrente consecuencias legales. Llamó “repugnante” a la violencia cometida en la residencia oficial.
El exgobernador Mark Schweiker, también republicano, calificó el atentado como un “acto despreciable de cobardía” y manifestó su apoyo al gobernador Shapiro y a su familia en un mensaje público.
Por su parte, Tom Ridge, quien ocupó el cargo de gobernador durante ocho años, describió como “desgarradoras” las imágenes de los daños en la residencia donde vivió junto a su familia. Declaró que el responsable del ataque debe rendir cuentas por sus actos.
Shapiro indicó que recibió numerosos mensajes de solidaridad y apoyo de parte de otros gobernadores y funcionarios. Confirmó que el Departamento de Justicia y otras agencias federales colaboran en la investigación.