Un padre ha solicitado a Lego “mejorar” después de que un gerente en una de sus principales tiendas se negara a imprimir una figura personalizada que incluía una cinta amarilla de rehenes. Shai Davidai, profesor en la Universidad de Columbia, contó que, durante una visita a la tienda de Manhattan con su hijo de ocho años, fue informado de que la cinta representaba un tema “político”.
Davidai detalló que mientras creaban la minifigura, que incluía una camiseta negra con la cinta de rehén amarilla y el lema “Tráiganlos a casa”, el gerente intervino en el proceso. Según el encargado, “los rehenes son una cuestión política”, y explicó que las políticas de Lego prohíben cualquier contenido de esta índole. Frente a esta situación, Davidai respondió afirmando que los rehenes son un asunto humanitario, compartiendo su asombro: “Me quedé impactado”, añadió, mencionando que todo ocurrió frente a su hijo.
El profesor describió cómo funciona el sistema de creación de minifiguras en la tienda. Los clientes eligen características como el tipo de piernas o accesorios mientras esperan la impresión. Pero cuando Davidai estaba en este proceso, el gerente lo reconoció y le advirtió que “no podía incluir lo que había escogido” para la figura.
El gerente le dio dos opciones: cambiar el diseño o solicitar un reembolso. Aunque no estaba satisfecho, Davidai optó por el reembolso, expresando que se sintió “asombrado, herido y deprimido” por el incidente. Antes de irse, Davidai habló con el gerente en la caja, subrayando: “Esto es inaceptable, hay rehenes que son niños, que estarían jugando con Lego si fueran libres”. El gerente respondió: “Creo que sabes que es [una cuestión política]”.
Reacciones y experiencias en otras tiendas de Lego
Más tarde, Davidai compartió lo sucedido en redes sociales, lo que provocó respuestas de otros usuarios. Algunos comentaron que habían logrado crear figuras similares en tiendas de Lego en Alemania e Israel. En Israel, por ejemplo, las cintas amarillas de rehenes y las figuras de Lego se exhiben de forma destacada.
Davidai concluyó que, tal vez, el gerente en la tienda de Nueva York actuó por su cuenta, sugiriendo que esa decisión podría no reflejar la política de la empresa. Sin embargo, aclaró que no busca incentivar protestas contra Lego, sino que “solo quiero que Lego lo haga mejor”.