La Autoridad de Antigüedades de Israel anunció que dos tumbas romanas de 1.700 años de antigüedad, adornadas con raras pinturas murales, han sido restauradas en la ciudad de Ashkelon y estarán abiertas al público por primera vez.
Las tumbas, descubiertas hace décadas, fueron utilizadas por familias adineradas entre los siglos II y IV d.C., y presentan representaciones mitológicas griegas, animales, plantas y figuras humanas, explicó la AAI.
La arqueóloga senior Dra. Elena Kogan-Zehavi destacó que estas tumbas son únicas en Israel y fueron construidas para la aristocracia romana de la época. Cada tumba tiene un estilo artístico distintivo, reflejando la creatividad individual de los artistas que las decoraron. Además, señaló que las imágenes transmiten una visión romana del más allá, en la que las familias no morían, sino que habitaban en el cielo.
Una de las tumbas, ubicada en un área previamente abandonada de Ashkelon, fue descubierta en los años 30 por arqueólogos británicos y contiene una variedad de pinturas detalladas, incluyendo una imagen de Medusa, la figura mitológica con serpientes en lugar de cabello.
Aunque en la mitología griega Medusa era una figura temida, los romanos la consideraban una protectora, afirmó Kogan-Zehavi.
La segunda tumba, excavada en los años 90, fue trasladada a su actual ubicación cerca del puerto debido a la construcción de una carretera. Esta tumba es más antigua, del siglo II d.C., y está decorada con escenas coloridas de figuras humanas y animales, simbolizando ciclos de vida y muerte.
El proceso de restauración de ambas tumbas fue complejo debido a las condiciones climáticas de la región. Las pinturas murales fueron cuidadosamente restauradas por expertos, quienes reforzaron la estructura para garantizar su conservación a largo plazo, informó Mark Abrahami, director de conservación de la AAI.
La ciudad de Ashkelon, situada al norte de la Franja de Gaza, cuenta con una rica historia arqueológica. Además de los romanos, la ciudad fue habitada por los filisteos durante la Edad de Hierro, hace más de 3.000 años.
En la actualidad, las tumbas forman parte de un proyecto más amplio para convertir los sitios arqueológicos de Ashkelon en atracciones turísticas y culturales, promoviendo su rica historia al público.
La arqueóloga Kogan-Zehavi expresó su satisfacción al ver cómo un proyecto en el que participó hace años ahora está accesible para todos. “Es un orgullo que algo que ayudé a descubrir se pueda disfrutar por el público”, concluyó.