Arqueólogos de la Necrópolis de Tebas, en el Alto Egipto, descubrieron nueve cabezas de cocodrilo halladas en tumbas antiguas por arqueólogos de la Universidad de Varsovia, según un informe publicado el viernes por Ancient Origins.
La necrópolis tebana está situada en la orilla occidental del río Nilo.
Las nueve cabezas estaban colocadas en el interior de dos tumbas, todas ellas pertenecientes a “nobles de alto rango”, según el informe. Los restos óseos no estaban momificados y contenían fragmentos de cráneos, dientes y osteodermos.
Todos fueron hallados en dos tumbas de la Necrópolis de el-Asassif, cerca del Templo Mortuorio de Hatshepsut, cuando arqueólogos de Varsovia los encontraron mientras excavaban. Las cabezas estaban envueltas en lino, informó Ancient Origins.
La expedición estaba dirigida por el arqueólogo Dr. Patryk Chudzik y la investigación se publicó en el Journal of African Archaeology. Los investigadores estuvieron estudiando el yacimiento durante más de nueve años.
En una entrevista concedida a la Agencia de Prensa Polaca, Chudzik afirmó que es la primera vez que se descubren restos de cocodrilo en el interior de tumbas egipcias. También es la primera vez que aparecen huesos de animales en tumbas egipcias, según Ancient Origins.
En la mitología y la cultura del antiguo Egipto
Chudzik también dijo que las cabezas de cocodrilo dentro de las tumbas eran inusuales, pero no sin precedentes.
En la mitología egipcia, el dios Sobek era representado y representado como un dios con cabeza de cocodrilo sobre un cuerpo humano. Sobek representaba la fuerza y la agilidad.
Los arqueólogos creían que las cabezas eran ofrendas para las personas enterradas en las tumbas.