Un magnífico tesoro de 97 monedas de oro puro, que datan de los siglos VI y VII d. C., se ha descubierto durante excavaciones arqueológicas en la antigua ciudad de Hipos (Sussita), cerca del mar de Galilea, según informó la Universidad de Haifa.
El tesoro también incluye docenas de fragmentos de joyas de oro con incrustaciones de perlas, piedras semipreciosas y vidrio.
“Este es uno de los mayores tesoros del periodo bizantino descubiertos en Israel, y su singularidad radica en la combinación de joyas y monedas de oro de los reinados de diferentes emperadores”, dijo en un comunicado el codirector de la expedición, el doctor Michael Eisenberg, del Instituto de Arqueología Zinman y del Departamento de Arqueología de la Universidad de Haifa.
“En algunas de las monedas se encontraron restos de tela, un rastro de la bolsa en la que se había escondido el tesoro”, agregó.
El tesoro se descubrió por primera vez durante las excavaciones de julio.
Las primeras monedas datan del reinado del emperador Justino I (518-527 d. C.), las más recientes, del inicio del reinado del emperador Heraclio (610-613 d. C.).
Fundada por los seléucidas griegos en la orilla oriental del mar de Galilea en el siglo II a. C., durante el periodo bizantino (330 d. C.-636 d. C.), Hipos se convirtió en una importante ciudad cristiana con al menos siete iglesias activas. Persistió incluso después de la conquista árabe en el siglo VII, hasta que un devastador terremoto en el año 749 d. C. arrasó la ciudad, que quedó abandonada para siempre.
Los arqueólogos creen que el tesoro pudo ser enterrado en el periodo previo a la conquista sasánida persa del año 614 d. C. Aunque los bizantinos recuperaron brevemente el control unos 15 años después, el tesoro permaneció oculto bajo tierra.
“El oro es un metal noble, y encontrar monedas y joyas de casi 1400 años de antigüedad que parecen nuevas es una experiencia poco común”, afirmó Eisenberg.