Una antigua moneda de medio shekel, fechada en los años 66 o 67, durante la rebelión judía contra los romanos, fue recientemente descubierta por inspectores de la Autoridad de Antigüedades de Israel.
Moneda histórica revela economía clandestina judía
Este descubrimiento representa un importante vestigio de la economía clandestina establecida por los judíos durante el tiempo de la rebelión. La moneda ostenta las palabras “Jerusalén Santa”, una afirmación desafiante de la identidad judía, acuñada en escritura hebrea en lugar del griego vernáculo de la época.
Las monedas de medio shekel se utilizaban para pagar un impuesto específico y también para financiar la economía interna durante la revuelta, según explica Yaniv David Levy, estudioso de numismática de la Autoridad de Antigüedades de Israel.
El acto de acuñar sus propias monedas fue una declaración política y de identidad nacional para los judíos, ya que en aquellos días solo el emperador romano tenía la autoridad para hacerlo.
Los detalles de la moneda ofrecen pistas sobre el pasado
Las monedas acuñadas por los judíos durante la revuelta eran diferentes a las acuñadas por los romanos, ya que solían tener la imagen del emperador y de animales. En cambio, estas monedas mostraban tres granadas y, en la otra cara, un cáliz junto con las palabras “medio shekel” y la letra aleph, que señala el primer año de la revuelta.
La moneda recién descubierta fue encontrada cerca del oasis de Ein Gedi durante una inspección exhaustiva de las cuevas del desierto de Judea, en un esfuerzo por descubrir y documentar hallazgos arqueológicos antes de que sean robados por saqueadores.
Amir Ganor, director del Proyecto de Prospección y Excavación del Desierto de Judea, señala que este proyecto ha registrado más de 800 cuevas y descubierto miles de hallazgos significativos en los últimos seis años.
El valor histórico de la moneda de medio shekel
Antes de la revuelta, los judíos pagaban el impuesto de medio shekel con monedas de plata fina acuñadas en Tiro, Líbano. Durante la rebelión, acuñaron monedas de siclo, medio siclo y cuarto de siclo de plata y bronce, marcadas con el año de la revuelta.
En el último año, se han descubierto otras monedas de medio shekel de este período en Jerusalén y Judea y Samaria, proporcionando pruebas adicionales del uso de estas monedas durante la revuelta.
La Autoridad de Antigüedades de Israel hizo público el hallazgo de la moneda justo antes de Tisha B’av, un día de luto judío que conmemora, entre otras cosas, la destrucción del Templo de Jerusalén por los romanos.
Descubrimientos arqueológicos fortalecen el vínculo con la historia
Este hallazgo arqueológico fortalece la conexión con la rica historia de Israel, y subraya la importancia de preservar y proteger estos tesoros culturales para futuras generaciones.
Como dice Eli Escusido, director de la Autoridad de Antigüedades de Israel, estos descubrimientos “nos recuerdan lo que ocurrió en el pasado y nos enseñan la importancia de trabajar por la unidad”.