El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, está renovando sus esfuerzos para formar un gobierno de unidad nacional con el grupo terrorista Hamás con el objetivo de convocar a elecciones nacionales palestinas largamente esperadas, informó el lunes el periódico árabe Asharq Al-Awsat.
Fuentes dijeron al diario londinense que la maniobra intenta evitar que la Franja de Gaza gobernada por Hamás quede aislada de Cisjordania (Judea y Samaria) como parte del plan de paz de la administración Trump, cuyos detalles aún no se han publicado.
Según el informe, el gobierno de Abbas está convencido de que el plan de los Estados Unidos contempla la creación de un Estado separado en la Franja de Gaza mientras expande el autogobierno palestino en Cisjordania.
Abbas tiene la intención de designar al ex primer ministro palestino Salam Fayyad para dirigir el nuevo gobierno de unidad. El líder de la Autoridad Palestina se reunió recientemente con Fayyad y discutieron el asunto por más de dos horas, dijeron las fuentes.
Se dice que Fayyad, quien renunció en 2013 en medio de una lucha de poder con Abbas, aceptó la propuesta a condición de que sea un “socio y responsable de la toma de decisiones” en el gobierno. Además, el ex primer ministro exigió el resurgimiento del difunto Consejo Legislativo Palestino, del cual es miembro, y la expansión de la membresía en la Organización de Liberación de Palestina.
El Consejo Legislativo Palestino celebró elecciones por última vez en 2006 y no se ha reunido plenamente desde 2007 debido a la toma de control de la Franja de Gaza por Hamás, que creó una enconada división con la Autoridad Palestina. Aunque la Autoridad Palestina tiene la tarea de gobernar los territorios palestinos, la OLP es el representante oficial de los árabes de la Autoridad Palestina en su conjunto.

Según los informes, Fayyad le dijo a Abbas que no estaba interesado en formar parte de un gobierno que no tiene plenos poderes. Entre las ideas que se dice que Fayad propuso es un referéndum palestino sobre cómo avanzar, que incluye establecer una fecha específica para “poner fin a la ocupación israelí”, y un pacto de no agresión entre las facciones palestinas.
Si Hamás, que abiertamente busca destruir Israel, accede al gobierno de unidad, Abbas pondría fin a las medidas que tomó contra Gaza y sus gobernantes, incluida una reducción en el suministro de electricidad y combustible, la cancelación de exenciones fiscales y la retención de los salarios de los empleados de la AP en Gaza, dijeron las fuentes.
Abbas tomó las medidas en un esfuerzo por presionar a Hamás para que abandone el control del territorio donde escasean la electricidad, el agua potable y el empleo.
El informe también cita al presidente del Comité Central de Fatah, Saeb Erekat, diciendo que un comité nacional, formado por Abbas, pronto publicará sus recomendaciones para resolver la crisis humanitaria en Gaza.
Según Asharq Al-Awsat, para que Fayyad regrese como primer ministro, necesitaría la aprobación del comité central del partido Fatah y el respaldo de Hamás.
Sin embargo, las fuentes evaluaron que ni Fatah ni Hamás se opongan al retorno de Fayyad en un acuerdo integral, ya que es visto como una figura unificadora en la política palestina.
El informe no abordó si el actual primer ministro de la AP, Rami Hamdallah, apoya la propuesta y estaría dispuesto a renunciar.
La reunión Abbas-Fayyad se produjo antes de los esperados esfuerzos de Egipto para terminar con la división entre Fatah y Hamás, según el informe. Los repetidos intentos de reconciliación entre las partes rivales, incluidos algunos mediados por Egipto, hasta ahora no han logrado llegar a un acuerdo. Un punto clave es la negativa de Hamás a aceptar una demanda de la Autoridad Palestina de que renuncie a sus armas.

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha anunciado su próximo plan de paz como “el acuerdo del siglo”. El asesor principal de Trump, Jared Kushner, y su enviado de paz de Medio Oriente, Jason Greenblatt, recorrieron la región en junio para reunirse con los líderes estatales.
Los dos visitaron Israel, Jordania, Arabia Saudita, Qatar y Egipto para discutir el tan anticipado plan de paz palestino-israelí, así como para conseguir ayuda humanitaria para la Franja de Gaza.
No se reunieron con representantes de la Autoridad Palestina, ya que Abbas cortó todo contacto con Washington sobre el reconocimiento de Trump de Jerusalén como capital de Israel en diciembre.
Durante la visita, Kushner dio una rara entrevista al periódico palestino Al-Quds en la que instó a los palestinos a no dejar que su liderazgo “asustado” rechace el plan de paz de la administración Trump, y expresó dudas sobre si Abbas realmente quería un acuerdo.