Los servicios de seguridad de la Autoridad Palestina han estado destruyendo documentos secretos, temiendo posibles operativos israelíes en sus oficinas mientras el Estado judío sopesa la aplicación de su soberanía en partes de Judea y Samaria, señalaron fuentes de seguridad de la AP.
“Se nos ha ordenado destruir los documentos confidenciales en nuestra posesión y hemos obedecido esta orden”, mencionó una fuente de seguridad a la AFP con la condición de mantener el anonimato, alegando que las instrucciones venían de “arriba”.
Durante la segunda Intifada, que estalló a principios del decenio del 2000 e incluyó oleadas de atentados suicidas, las fuerzas de seguridad israelíes irrumpieron repetidamente en las oficinas de los servicios de seguridad de la Autoridad Palestina y retiraron documentos confidenciales.
Varias fuentes de seguridad de la AP, hablando con condición de anonimato, afirman que a los servicios les preocupa que esto pueda volver a suceder si Israel sigue adelante con la aplicación de su soberanía.
Anunciado a finales de enero en Washington, el plan de paz para Medio Oriente del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, prevé la aplicación de la soberanía israelí de sus poblados y del Valle del Jordán en Judea y Samaria.
Una fuente de seguridad de la AP, que no describió la naturaleza de los documentos, señaló que los servicios de seguridad comenzaron a destruirlos hace un mes, después de que el presidente de la AP, Mahmoud Abbas, indicara que estaba terminando la coordinación de seguridad con Israel.
Otras dos fuentes de seguridad mencionaron que algunos documentos fueron destruidos después de ser escaneados y transferidos a unidades USB, que luego fueron colocados en “lugares secretos”.
Según los Acuerdos de Oslo de 1993, la Autoridad Palestina controla todas las ciudades árabes palestinas de Judea y Samaria, pero el ejército israelí puede entrar en ellas para hacer detenciones, en coordinación con las autoridades locales.
Aunque a mediados de mayo, Abbas declaró que ya no se sentía obligado por los tratados, diciendo que los planes de soberanía de Israel mostraban que ya no estaba cumpliendo los acuerdos.
Los analistas afirmaron que el fin de la cooperación en materia de seguridad podría inflamar los disturbios en la AP.
El primer ministro de la AP, Mohammed Shtayyeh, advirtió recientemente de un “verano caluroso” si Israel sigue adelante con la aplicación de su soberanía.