El Ministerio de Salud y el Centro Nacional de Trasplantes dejaron claro el martes que el alto funcionario de la Autoridad Palestina (AP), Saeb Erekat, solo podría someterse a un trasplante de pulmón en Israel en circunstancias muy complejas.
El periódico Yediot Aharonot informó anteriormente que Erekat, que actúa como negociador jefe de la AP, está sufriendo de una grave enfermedad pulmonar y recientemente ha tenido un giro a peor, pero espera que un trasplante de pulmón de Israel pueda salvarle la vida.
“Sólo los pacientes que son residentes del Estado de Israel pueden ser inscritos en la lista de espera nacional para trasplantes”, dijo el Ministerio de Salud y el Centro Nacional de Trasplantes el martes por la noche en un comunicado en la página de Facebook de la ADI Donor Card, que testifica la voluntad del titular de donar sus órganos tras su muerte.
“El orden de prioridades para los trasplantes se determina según criterios médicos solamente, sin excepciones, de acuerdo con el principio de que solo un residente de Israel que necesita el trasplante recibirá la donación”, agregó el comunicado.
“En los casos en que no se encuentre ningún paciente israelí que reciba el órgano, es posible trasplantar el órgano donado a un no residente de Israel, con el consentimiento de la familia del donante, en coordinación con el centro de trasplante”.
“Se ha pedido al Ministerio de Salud que haga una excepción e incluya al Sr. Saeb Erekat en la lista de espera. Por razones jurídicas, el Ministerio de Salud no puede conceder esta petición excepcional, debido al compromiso de preservar la pureza de los procedimientos de asignación. El Sr. Erekat solo podrá recibir una donación de órganos utilizando el procedimiento relativo a los no residentes de Israel, como se señaló anteriormente”, concluyó el comunicado.
Que Erekat espere recibir un pulmón en Israel para el trasplante es un giro irónico de los acontecimientos para un hombre que durante décadas acusó a Israel de persecución contra árabes e incluso de genocidio.
Antes del diagnóstico de su condición, Erekat a menudo representaba a la AP en los medios de comunicación occidentales, atacando a Israel y acusando al Estado judío de genocidio, masacres y crímenes de guerra.
En 2014, Erekat defendió el uso del término “genocidio” para describir la lucha de Israel contra la organización terrorista islámica Hamás en Gaza tras el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes y una ola de mortales ataques con cohetes contra ciudades israelíes.
En 2013, Erekat acusó a Israel de aplicar una política de apartheid en Judea, Samaria y Jerusalén.