Hussein al-Sheikh, alto funcionario palestino, parece retractarse de sus recientes críticas a Hamás y rechaza los llamamientos a considerarla una organización terrorista.
“Mientras el mundo hablaba y exigía que se designara a Hamás como organización terrorista, ¿quién plantó cara al mundo? ¿No fue Abu Mazen quien se puso delante de la ONU y declaró: «No, Hamás no es una organización terrorista?»”, dice al-Sheikh, refiriéndose al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas.
“El verdadero terrorismo es la ocupación israelí. El verdadero terrorismo son los asentamientos. El verdadero terrorismo es el crimen que se comete contra el pueblo palestino. Hemos hecho nuestros deberes… y sabemos muy bien cuáles son nuestras prioridades y cómo defender nuestro frente interno”, añade al-Sheikh.
La semana pasada, al-Sheikh declaró a Reuters que Hamás necesita reconsiderar su enfoque tras la guerra en curso. Fue el último comentario de un alto cargo de la AP en el que criticaba a Hamás, que ha experimentado un gran aumento de popularidad en Cisjordania desde el 7 de octubre a costa de la AP.
En un intento de controlar los daños, al-Sheikh dice que sus palabras a Reuters fueron “distorsionadas”.
“La Autoridad Palestina fue la primera en defender a la resistencia”, dice a Al Yazira.
“Lo que necesitamos ahora es el aislamiento en la escena internacional del gobierno extremista israelí encabezado por Benjamin Netanyahu”, prosigue. “Los Acuerdos de Oslo han muerto y han sido enterrados bajo las cadenas de los tanques israelíes”.
El comentario coincide con lo que Netanyahu ha dicho en las últimas semanas, prometiendo no repetir la fórmula de Oslo en la que Israel y la OLP se reconocieron mutuamente y dieron pasos hacia la autodeterminación palestina junto a Israel.
Defiende la incapacidad de la AP para hacer frente al gobierno israelí, afirmando que Ramala está bajo “el martillo israelí” y no dispone de “un millón de soldados” para enfrentarse a Israel. Al-Sheikh añade que la AP no quiere ver “el mismo nivel de matanzas y desplazamientos de palestinos” en Cisjordania que el que dice que se registra actualmente en la Franja de Gaza.
Reconoce que la “vía de las negociaciones” con Israel propugnada por la AP ha tropezado con dificultades debido al “gobierno israelí de extrema derecha” y afirma que el pueblo palestino debe decidir en las elecciones “si la doctrina nacional es la resistencia armada [contra Israel] o un acuerdo político [con Israel]”.