El decano de estudiantes de la Grand Canyon University, Tim Griffin, lidera una delegación de estudiantes estadounidenses en Israel para expresar su oposición a los boicots contra el Estado judío.
“Sentí que era importante venir a Israel, especialmente en este momento, cuando enfrenta amenazas tanto de enemigos circundantes como de aquellos que llaman al boicot desde lejos, como en las universidades estadounidenses”, afirma Griffin.
La delegación de Griffin es la primera visita estudiantil desde el 7 de octubre organizada por Passages, una organización cristiana sin fines de lucro en EE. UU. con un presupuesto anual de aproximadamente 15 millones de dólares. Esta organización ha facilitado viajes de estudio y activismo para miles de estudiantes en Israel.
Con cerca de 100,000 estudiantes distribuidos en nueve facultades, Griffin espera que esta visita de diez días inspire a otras instituciones educativas cristianas a “visitar, interactuar y asociarse con el pueblo israelí”.
A diferencia de algunas universidades estadounidenses, destaca que “los estudiantes de la Grand Canyon University apoyan abrumadoramente a Israel”.
El viaje incluye reuniones con funcionarios israelíes y visitas a lugares afectados por la masacre del 7 de octubre, además de sitios donde las víctimas reciben apoyo emocional y ayuda.
La cofundadora de Passages y ex asesora del primer ministro Benjamin Netanyahu, Rivka Kidron, menciona que el objetivo es realizar “actos de bondad y solidaridad” y comprender las complejidades actuales de Israel.