El Comité Olímpico Internacional expresó el viernes su desaprobación ante la decisión del gobierno indonesio de impedir el ingreso de atletas israelíes al próximo Campeonato Mundial de Gimnasia. Las autoridades locales denegaron las visas de las gimnastas israelíes para la competencia prevista desde el domingo, lo que motivó una apelación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo.
La Federación Israelí de Gimnasia exigió al tribunal que garantizara la participación de sus representantes o dispusiera el traslado o la cancelación del evento. Sin embargo, el organismo jurídico deportivo desestimó la solicitud, dejando sin posibilidad de competencia a los deportistas israelíes en los campeonatos que se celebrarán del 19 al 23 de octubre en Indonesia.
En una declaración oficial emitida el viernes, el COI manifestó una profunda preocupación por la medida adoptada por Yakarta y anunció que abordará la situación particular del país asiático en la próxima reunión de su Junta Ejecutiva. El organismo recordó que su postura se basa en el principio de igualdad de participación sin discriminación en los eventos internacionales.
El COI subrayó que corresponde al país anfitrión, junto con los organizadores y las entidades deportivas implicadas, garantizar el cumplimiento absoluto de ese principio. Recalcó además que el ámbito deportivo debe mantenerse como un entorno seguro donde los atletas puedan desarrollar su carrera sin ser afectados por decisiones políticas ajenas a su labor.
El gobierno indonesio justificó la negativa de ingreso a las gimnastas israelíes con el argumento de su respaldo a la causa palestina. Situaciones parecidas se registraron antes de la reciente ola de rechazo internacional hacia Israel a raíz de la guerra con Hamás en Gaza.
En julio de 2023, Indonesia renunció a organizar los Juegos Mundiales de Playa de la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales después de surgir un conflicto sobre la presencia israelí. Meses antes, en marzo del mismo año, la FIFA le retiró la sede de la Copa Mundial Sub-20 por la oposición de dos gobernadores a la participación del equipo israelí.
Durante décadas, Indonesia ha sostenido una política de exclusión hacia delegaciones israelíes, iniciada en los Juegos Asiáticos de 1962, cuando tanto Israel como Taiwán fueron vetados de la competencia en Yakarta. Esa línea diplomática se ha mantenido constante hasta la actualidad sin interrupciones significativas.
Aunque no mantiene relaciones diplomáticas con Israel, el sistema migratorio indonesio contempla un mecanismo denominado “visa de llamada” que permite a ciudadanos israelíes o a sus patrocinadores solicitar permisos temporales. En casos de doble nacionalidad, los israelíes también pueden acceder al país utilizando su segundo pasaporte.