Bruce Pearl, entrenador de baloncesto de la Universidad de Auburn, invitó a la familia del rehén estadounidense-israelí Edan Alexander al partido contra Michigan, donde también conocieron a su jugador preferido, Danny Wolf, integrante de los Wolverines.
En una conferencia de prensa esta semana, Pearl interrumpió el tema deportivo para exigir la liberación de Alexander y del resto de los secuestrados que aún permanecen en Gaza. Subrayó que la mayoría de los estadounidenses desconoce que hay un rehén con ciudadanía de su país.
Durante su intervención, cuestionó por qué su equipo ha tenido tanto éxito en los últimos ocho años y atribuyó esos logros a un propósito divino. Afirmó que ese éxito le otorgó una plataforma para recordar al mundo que Edan Alexander continúa cautivo y que su nombre sigue siendo desconocido para gran parte del país.
Consultado después sobre su motivación para pronunciarse sobre los rehenes y la guerra entre Israel y Hamás, Pearl, reconocido partidario del presidente Donald Trump, aludió a su identidad judía y a la historia migratoria de su familia en Estados Unidos.
Aseguró sentir un profundo amor por su país y defendió a Israel como su patria ancestral, víctima de un asedio continuo. destacó que ese país solo busca coexistir en paz con sus vecinos.