El equipo de fútbol del Unión Berlín recibirá al Maccabi Haifa el jueves por la tarde en la Liga de la Conferencia Europea, en un partido que será el primero que dispute un club israelí en el Estado Olímpico de de Berlín.
El estadio se construyó para los Juegos Olímpicos de 1936 que organizó la Alemania nazi y fue donde Adolf Hitler lanzó uno de los eventos deportivos más controvertidos de la historia, hace 85 años.
“Sabemos que este partido tiene una importancia muy especial, más allá del aspecto deportivo, para nuestros invitados de Haifa y para la comunidad judía de Berlín”, declaró el presidente de la Unión, Dirk Zingler.
“Este no es un partido más para nosotros. Aquí ocurrieron atrocidades”, dijo el entrenador del Maccabi Haifa, Barak Bakhar, en una rueda de prensa el miércoles, en la que afirmó que el equipo había realizado una visita “emotiva” al famoso monumento al Holocausto de Berlín.
Bajo un clima lluvioso, los jugadores y el personal escucharon una explicación sobre el monumento y colocaron una corona de flores, una bandera israelí y una bandera del Maccabi Haifa en una de sus muchas losas de hormigón.
El presidente del equipo, Ya’akov Shahar, dijo que era la segunda vez que el Maccabi se enfrentaba a un club de la máxima liga alemana, y que la vez anterior se combinó con una visita al campo de concentración de Dachau.
“El mero hecho de jugar de igual a igual con nuestros anfitriones lo dice todo. Significa que hemos ganado”, dijo Shahar. “También los recibiremos y, si es posible, los acogeremos en el Yad Vashem [Museo del Holocausto en Jerusalén], para que puedan ver y conocer su pasado”.
El estadio suele ser utilizado por el Hertha de Berlín, el rival de la ciudad del Union, pero esta temporada ha sido ocupado por el Union para las competiciones europeas, ya que el propio estadio del equipo, situado en el barrio oriental de Köpenick, no tiene suficiente aforo para cumplir las exigencias de la UEFA.