Alemania y Turquía cuestionaron la intención de Israel de duplicar la población en los Altos del Golán, calificando la medida de preocupante y contraria al derecho internacional.
Reacciones internacionales contra el plan israelí en el Golán
Israel enfrenta críticas internacionales tras anunciar su plan para duplicar la población israelí en los Altos del Golán, un territorio que permanece en disputa desde que fue anexado en 1981. Alemania fue uno de los países en manifestarse en contra, instando a Israel a abandonar la medida, mientras que Turquía calificó el proyecto como una “fuente de grave preocupación”.
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores alemán afirmó que “esta zona controlada por Israel pertenece a Siria según el derecho internacional”, reiterando que Israel actúa como potencia ocupante en el área. Berlín, a través de su vocero Christian Wagner, solicitó a Israel reconsiderar su decisión, la cual fue anunciada oficialmente el domingo.
El plan israelí se centra exclusivamente en la zona ya anexada del Golán y no incluye el área desmilitarizada que Israel tomó la semana pasada tras la caída del presidente sirio Bashar al-Assad. Sin embargo, el proyecto ha generado fuertes reacciones en el ámbito internacional, especialmente en Medio Oriente.
Además de Alemania y Turquía, países como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos también han expresado su rechazo, calificándolo como una violación al derecho internacional y una amenaza para la estabilidad en Siria.
Detalles clave sobre el plan y la situación en el Golán
- Israel busca duplicar la población en los Altos del Golán con una inversión de 40 millones de NIS (11 millones de dólares).
- El financiamiento se destinará a proyectos como educación, energía renovable y una nueva aldea estudiantil.
- Actualmente, unas 50,000 personas viven en el lado israelí del Golán, divididas entre judíos y drusos.
- El territorio fue anexado por Israel en 1981 tras ser conquistado durante la Guerra de los Seis Días en 1967.
- El reconocimiento de la anexión por parte de Estados Unidos en 2019 no ha sido respaldado por la mayoría de la comunidad internacional.
Alemania y Turquía advierten sobre tensiones en la región
Christian Wagner, portavoz del gobierno alemán, hizo énfasis en la necesidad de respetar la integridad territorial de Siria en este momento de agitación política. Según sus declaraciones, es crucial que los actores en la región eviten acciones que pongan en riesgo dicha integridad. Wagner también reconoció las preocupaciones de seguridad de Israel, particularmente el temor a que las armas del régimen de Assad caigan en manos de actores hostiles, pero reiteró que cualquier medida debe respetar el derecho internacional.
Por su parte, Turquía, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, emitió un comunicado en el que denunció el plan como parte de una estrategia israelí para “expandir sus fronteras a través de la ocupación”. La nación turca también advirtió que la entrada de Israel en la zona de amortiguación establecida tras el Acuerdo de Separación de 1974 representa una violación de dicho tratado y complica los esfuerzos por estabilizar Siria.
Las tensiones en la región se han incrementado debido a los ataques aéreos de Israel contra objetivos en Siria, incluyendo sitios estratégicos y arsenales militares. Según Israel, estas operaciones buscan impedir que armas avanzadas, incluidas químicas, lleguen a manos de grupos hostiles como Hezbolá.
Condenas de países árabes al plan israelí
Las naciones árabes también reaccionaron con firmeza ante el anuncio del gobierno israelí. Arabia Saudita describió el proyecto como un acto de “sabotaje” contra Siria, mientras que Qatar lo calificó como una “agresión flagrante” y una violación al derecho internacional. Los Emiratos Árabes Unidos se unieron a las críticas, alertando que este tipo de decisiones podrían agravar las tensiones en una región ya inestable.
Israel, por su parte, sostiene que su presencia y planes en los Altos del Golán son necesarios para garantizar su seguridad ante las amenazas provenientes de Siria, especialmente tras la caída de Assad. No obstante, el anuncio ha vuelto a poner en evidencia las disputas internacionales en torno a este territorio estratégico.
Contexto histórico de los Altos del Golán
El control de los Altos del Golán por parte de Israel se remonta a la Guerra de los Seis Días en 1967, cuando el país capturó el territorio de Siria. En 1981, Israel anexó oficialmente la zona, aunque esta acción no fue reconocida internacionalmente, salvo por Estados Unidos en 2019. El área ha sido un punto de tensión constante entre Israel y sus vecinos, debido a su importancia estratégica y a los conflictos sobre soberanía territorial.
El acuerdo de separación de 1974, que puso fin a la Guerra de Yom Kippur, estableció una zona de amortiguación en el Golán administrada por fuerzas internacionales, cuya reciente violación ha añadido más controversia a la situación. Israel sostiene que estas acciones buscan proteger su seguridad, mientras que otros actores internacionales exigen moderación y respeto por la soberanía siria.