WASHINGTON – El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, habló por teléfono con el primer ministro Yair Lapid el miércoles, en la primera llamada pública entre un alto funcionario de la Casa Blanca y Lapid desde que asumió el cargo la semana pasada.
Blinken felicitó a Lapid por su nombramiento como primer ministro y reafirmó el “inquebrantable compromiso de Washington con la asociación entre Estados Unidos e Israel, la seguridad de Israel y la lucha contra las amenazas compartidas, incluidas las de Irán”, según informó el Departamento de Estado en un comunicado.
El máximo diplomático estadounidense “también hizo hincapié en el apoyo de EE. UU. a una solución negociada de dos Estados” y dijo que “Biden espera celebrar nuestra asociación con Israel durante su próxima visita”.
La cuenta de Twitter del presidente estadounidense Joe Biden publicó un mensaje de felicitación a Lapid en la medianoche del jueves al viernes, en el momento en que sustituyó oficialmente a Naftali Bennett como primer ministro.
Los medios de comunicación hebreos informaron entonces, citando a funcionarios israelíes, de que Biden llamaría a Lapid el viernes, pero la conversación de Blinken del miércoles indicó que el presidente no hablaría con el primer ministro hasta que Biden aterrice en Israel para una visita el próximo miércoles. Biden irá a Israel y Cisjordania durante el viaje de tres días.
La oficina de Lapid no ha informado de que haya recibido llamadas de felicitación de ningún líder mundial desde que asumió el cargo. El martes se reunió con el presidente francés Emmanuel Macron en París.
Las declaraciones de los funcionarios de Biden han destacado el apoyo de la administración a una solución de dos estados para el conflicto palestino-israelí, pero ahora la administración trabajará por primera vez con un primer ministro israelí que apoya abiertamente el concepto.
Los ex primeros ministros Benjamin Netanyahu y Naftali Bennett se negaron a respaldar públicamente el formato para resolver el conflicto desde que Biden fue elegido. Tanto Netanyahu como Benntt tienen estrechos vínculos con la construcción en Judea y Samaria.
Lapid se ha mostrado dispuesto a hacer concesiones territoriales para establecer un Estado palestino, pero también se opone a dividir cualquier parte de Jerusalén, lo que se considera imposible para los palestinos, que consideran Jerusalén Este como la capital de su futuro Estado.
Sin embargo, Lapid tendrá poco poder para aprobar leyes mientras actúe como primer ministro interino. Los israelíes acudirán a las urnas el 1 de noviembre para celebrar sus quintas elecciones nacionales en menos de cuatro años.
El martes, Lapid dijo que no descartaba reunirse con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, pero que no había planes inmediatos de conversaciones.
“Los límites de lo que se puede hacer teniendo en cuenta el actual liderazgo palestino y el malestar político de Israel están claros para todos”, dijo.