El ministro británico de Asuntos Exteriores, David Cameron, pidió el martes a Israel que garantice que la ayuda humanitaria llega a los civiles palestinos de Gaza, advirtiendo de que violaría el derecho internacional si no lo hace, al tiempo que subrayó que cualquier alto el fuego que deje a Hamás en el poder no se mantendrá.
“Lo que está ocurriendo en Gaza es trágico. Queremos que se ponga fin al sufrimiento y a esta matanza”, declaró durante el turno de preguntas en la Cámara de los Lores. “La pausa que pedimos queremos convertirla en un alto el fuego, asegurándonos de que se dan las condiciones adecuadas”.
Cameron dijo que estas condiciones incluían sacar “a los líderes de Hamás de Gaza, de lo contrario cualquier alto el fuego no durará porque el problema seguirá ahí. Hay que desmantelar la operación de ataques terroristas”.
“Tienes que poner en marcha un nuevo gobierno de la Autoridad Palestina. Tienes que dar al pueblo palestino un horizonte político hacia un futuro mejor y una solución de dos Estados. Y, sobre todo, hay que liberar a todos los rehenes y hacerlo muy rápidamente”, añadió.
Cameron dijo que ha “desafiado personalmente” a Israel por incidentes concretos en Gaza, tras ser presionado por la sonada muerte de una joven gazatí que había suplicado ser rescatada y luego apareció asesinada.
“Seguiremos haciéndolo como parte de un proceso muy importante que llevamos a cabo para juzgar si cumplen con el derecho internacional humanitario”, afirmó.
A Cameron se le preguntó si estaba “al tanto de cualquier movimiento de Hamás para proteger a los niños de Gaza”, liberando a los rehenes, deteniendo los ataques contra Israel y haciendo que sus líderes huyeran al Golfo. Respondió recordando a los niños israelíes asesinados y secuestrados por terroristas palestinos durante la embestida del 7 de octubre dirigida por Hamás.
“Está bien que en esta casa sigamos preguntando qué más debería hacer Israel, pero también deberíamos, al mismo tiempo, decir lo que debería hacer Hamás, que es deponer las armas y parar ahora mismo. Podrían poner fin a esta lucha inmediatamente”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores.
Cameron reiteró a continuación que “nuestro objetivo” debe ser negociar un alto el fuego que conduzca a un alto el fuego permanente, “pero es crucial que la pausa sea necesaria para hacer llegar la ayuda y sacar a los rehenes”.
También instó a Israel a “pararse a pensar” antes de llevar a cabo cualquier operación en Rafah, la ciudad más meridional de Gaza.
“La gente que está en Rafah en muchas ocasiones ya se ha movido tres, cuatro o cinco veces. Y no es posible desplazarse de nuevo. No pueden ir al norte porque volverían a casas que han sido destruidas. No pueden ir al sur porque eso implicaría entrar en Egipto, algo que ninguno de nosotros quiere ver, y los egipcios no quieren ver”, dijo.
“Por eso es tan importante que los israelíes se paren a pensar antes de seguir adelante con cualquier operación en Rafah”.
Cameron dijo que aunque Israel tenía “todo el derecho a responder” al ataque del 7 de octubre, describiéndolo como “el mayor pogromo desde el Holocausto”, “debe obedecer el derecho humanitario internacional.”
“Eso implica no solo lo que hacen Las FDI en cuanto a la forma en que llevan a cabo sus acciones en esta guerra, sino que también significa que, como son la potencia ocupante en Gaza, tienen que asegurarse de que la ayuda humanitaria, los alimentos, el agua y el refugio están a disposición de la gente en Gaza, porque si no lo hacen, eso también sería una violación del derecho internacional humanitario”, dijo.
Además, se preguntó a Cameron si el “reconocimiento unilateral prematuro” de un Estado palestino recompensaría a Hamás, algo que, según ha dicho recientemente, Gran Bretaña está considerando hacer.
“Por supuesto, no es recompensar a Hamás”, insistió. “Hamás no cree en una solución de dos Estados; cree en la destrucción de Israel”.
“Tenemos que intentar ayudar a separar al pueblo palestino de Hamás”, continuó Cameron. “Una de las mejores formas de hacerlo… es ofrecer al pueblo palestino… una mejor gobernanza con una Autoridad Palestina reformada y el horizonte a largo plazo de una solución de dos Estados”.
“Que [el reconocimiento] no se produzca al principio no significa que tenga que esperar hasta el final. Una de las cosas que está empezando a cambiar, lo que me parece esperanzador, es la postura estadounidense [que] hasta ahora ha sido que el reconocimiento solo puede llegar cuando Israel y Palestina acuerden la creación de un Estado palestino. Si se hace así, se concede a Israel el derecho de veto sobre un Estado palestino, y creo que eso es lo contrario de crear el impulso imparable hacia una solución de dos Estados que todos deseamos”.