Al parecer, el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, lleva casi una semana negándose a mantener una llamada telefónica con su homólogo israelí, Yair Lapid, debido a la posición de Israel sobre la guerra del país con Rusia.
Lapid intentó hablar con Kuleba la semana pasada, pero le dijeron que el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano estaba ocupado, según informaron el domingo por la noche los sitios de noticias Haaretz y Walla.
Lapid no ha recibido respuesta desde entonces, según los informes, citando fuentes del gobierno ucraniano.
Ambos informes dicen que los dos hombres no han hablado durante más de tres meses.
Walla citó a un funcionario ucraniano no identificado que dijo que una de las razones por las que Kuleba no se había puesto en contacto con Lapid era que el principal diplomático de Israel había telefoneado al ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, pero no se había puesto en contacto con Kuleba, en las semanas previas a la invasión rusa de Ucrania del 24 de febrero.
Al parecer, Lapid tampoco respondió a una invitación para visitar Kiev, que le transmitió la viceministra de Asuntos Exteriores ucraniana, Emine Dzhaparova, cuando visitó Israel el mes pasado.
Sin embargo, funcionarios israelíes citados por ambos sitios de noticias dijeron que creen que Kuleba y Lapid hablarán entre sí en los próximos días.
“Israel mantiene un contacto continuo con el gobierno de Ucrania y el ministro de Asuntos Exteriores Lapid condenó más de una vez la invasión rusa de Ucrania. Seguiremos ayudando a Ucrania en la medida de lo posible”, dijo la oficina de Lapid en respuesta a los informes.
Israel mantiene desde hace tiempo buenas relaciones tanto con Ucrania como con Rusia, y ha estado tratando de utilizar su posición única para mediar en un acuerdo, ya que también trata de caminar en la cuerda floja manteniendo sus vínculos con ambos países.
El primer ministro Naftali Bennett habló por teléfono con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky el sábado por la noche, una conversación que se produjo varias horas después de que el líder ucraniano propusiera que Jerusalén acogiera las conversaciones sobre el alto el fuego entre Kiev y Moscú, y afirmara que Israel podría desempeñar un “papel importante” en los esfuerzos para poner fin a la guerra.
La relación de Israel con Kiev se ha tensado por el hecho de que Bennett ha evitado culpar directamente a Rusia de la guerra, aunque Lapid lo ha hecho en varias ocasiones, la última durante una visita a Rumanía el domingo.
Ucrania ha presionado repetidamente a Israel para que le preste más apoyo desde que Rusia lanzó su invasión. Pero Israel ha tratado de evitar enemistarse con Rusia, que tiene una fuerte presencia en Siria, donde Israel lleva a cabo acciones militares contra grupos vinculados a Irán.
En los últimos días se han producido numerosos altibajos aparentes en las relaciones de Kiev con Jerusalén, ya que en ocasiones Ucrania ha alabado los esfuerzos diplomáticos y humanitarios de Israel y en otras ha criticado duramente su reticencia a ayudar más de lo que había hecho.
Un nuevo ejemplo de ello se produjo el sábado, cuando el ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, advirtió que la falta de una postura clara de Israel contra la invasión rusa podría ensombrecer los lazos entre Kiev y Jerusalén en los próximos años.
“Israel está mostrando una inexplicable desconexión y reticencia a elegir un bando en la guerra de Ucrania”, dijo en un vídeo compartido en las redes sociales.
“Esto provocará una creciente falta de confianza durante muchos años porque ganaremos, sin duda, con vosotros o sin vosotros”, dijo.
“¿Qué podéis hacer? Eres muy influyente en el mundo y en tu región”, añadió. “Podrías expresar tu posición de forma más activa”.
La semana pasada, Kuleba se disculpó tras acusar por error a la compañía aérea de bandera israelí El Al de permitir a sus clientes realizar pagos a través de un sistema bancario ruso, lo que habría supuesto una violación de las sanciones occidentales.