Egipto ha vuelto a advertir a Israel de que cualquier desplazamiento masivo de palestinos a su territorio pondría en peligro el acuerdo de paz que ambos países mantienen desde hace décadas y sus estrechos lazos en materia de seguridad.
Israel ha estado preparando una ofensiva masiva en Rafah, la ciudad más meridional de Gaza, el último bastión de Hamás en la Franja, donde se refugian más de un millón de palestinos desplazados.
El viernes, cuando Israel informó a Egipto de la ampliación de la operación terrestre a Rafah, las autoridades egipcias volvieron a advertirles de que, si se empujaba a algún gazatí a la península del Sinaí, “se suspendería un tratado de paz de décadas de duración entre los dos países”, según el informe.
“Hay un espacio limitado y un gran riesgo en someter a Rafah a una nueva escalada militar debido al creciente número de palestinos allí”, dijo el sábado el ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Sameh Shoukry, durante una rueda de prensa, advirtiendo de que una escalada tendría “consecuencias nefastas”.
Egipto ha afirmado en repetidas ocasiones que no permitirá una afluencia de palestinos a su territorio, advirtiendo previamente de que tal escenario “rompería” los lazos israelo-egipcios.