Papúa Nueva Guinea, una nación rica en recursos, pero en gran parte subdesarrollada al norte de Australia, se unirá a un grupo selecto de países al abrir una embajada en Jerusalén. Esta decisión, largamente solicitada por los grupos eclesiásticos pro-Israel en la profundamente cristiana nación del Pacífico, busca consolidar la relación entre ambas naciones y fomentar la inversión extranjera.
Impulsando la Relación Bilateral
El primer ministro de Papúa Nueva Guinea, James Marape, ha anunciado su intención de establecer una embajada en Jerusalén, destacando la importancia de Israel en términos de tecnología agrícola y colaboración económica. Esta decisión ha sido alentada por grupos eclesiásticos que han abogado durante mucho tiempo por una embajada en Jerusalén.
Marape, comprometido con su objetivo de transformar Papúa Nueva Guinea en la “nación cristiana negra más rica”, declaró que viajará a Israel para la apertura oficial de la embajada el 5 de septiembre. Este anuncio fue realizado en el marco de la fiesta nacional de la oración en Papúa Nueva Guinea, celebrada el 26 de agosto. Además, Marape reveló su intención de presentar una ley que declare oficialmente a Papúa Nueva Guinea como un país cristiano.
Estableciendo Lazos Diplomáticos
Una delegación de pastores acompañará a Marape en su viaje a Israel para la inauguración de la embajada, subrayando la importancia de la relación entre ambas naciones. El pastor Peter Harut, delegado en Papúa Nueva Guinea de la Embajada Cristiana Internacional de Jerusalén, expresó su entusiasmo: “Tenemos que tener una relación con Israel. Es lo que el pueblo ha estado soñando”.
La mayoría de los países mantiene embajadas en Tel Aviv, mientras que solo Estados Unidos, Kosovo, Guatemala y Honduras tienen embajadas en Jerusalén. Israel considera Jerusalén su capital indivisible debido a sus raíces bíblicas judías, aunque esta posición no cuenta con un amplio reconocimiento internacional.
Fortaleciendo Vínculos Estratégicos
La visita de Marape a Israel aún no ha sido oficialmente anunciada por el gobierno israelí, pero se espera que tenga lugar del 4 al 6 de septiembre. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, asistirá a la inauguración de la embajada el 5 de septiembre, lo que le brinda la oportunidad de resaltar su liderazgo en medio de los desafíos diplomáticos que enfrenta su gobierno de derecha.
La embajada de Papúa Nueva Guinea en Jerusalén ocupará 200 metros cuadrados y se espera que reciba un descuento significativo en el impuesto municipal sobre bienes inmuebles, como parte de la política para atraer embajadas y empresas a Jerusalén. Se estima que el alquiler mensual será de alrededor de 20.000 dólares.
Fortaleciendo la Agenda de Política Exterior
El empresario Douveri Henao, presidente del Consejo Judío PNG-Israel y miembro del equipo de redacción del Libro Blanco de Política Exterior de Papúa Nueva Guinea, participará en la ceremonia de inauguración. Este consejo, compuesto por seis personas, está encargado de definir la agenda de política exterior del país y ha enfocado su atención en la estrecha relación con Israel en áreas como agricultura, sanidad y tecnología.
La apertura de la embajada en Jerusalén representa un paso importante en la estrategia de Marape para ampliar los vínculos internacionales de Papúa Nueva Guinea, que este año ha recibido líderes de India, Francia y funcionarios de alto nivel de Estados Unidos. Esta decisión, guiada por la fe y la búsqueda de oportunidades económicas, marca un nuevo capítulo en la relación entre estas dos naciones.