Empresas israelíes han ofrecido al gobierno de Azerbaiyán en Bakú ayuda para rehabilitar el territorio de Nagorno-Karabaj, según declaró el embajador de Azerbaiyán en Turquía, Ibrahim Khazar, a la agencia estatal turca Anadolu.
Entre los que ofrecieron ayuda a Bakú se encuentran Turquía, Irán, Gran Bretaña, Italia, Hungría y Japón. “La rehabilitación de los territorios liberados se llevará a cabo asegurando la preservación del patrimonio histórico y auténtico de la región junto con las innovaciones tecnológicas”, dijo el enviado.
Según Khazar, el Corredor de Najicheván, producto de una de las cláusulas de alto el fuego de la Segunda Guerra de Karabaj, ha creado nuevas oportunidades de cooperación regional, entre las que destacan los trenes de exportación que ya han empezado a pasar por Azerbaiyán en su camino desde Estambul hasta Asia Central e incluso China en las últimas semanas.
Sin embargo, la guerra ha hecho mucho daño, en particular a la economía de Azerbaiyán. Según Khazar, “la magnitud de los daños materiales de los ataques de Armenia asciende a más de 50 millones de dólares”. Señaló que “tras la liberación, las imágenes de nuestras tierras históricas eran de devastación”.
Según las evaluaciones de Azerbaiyán, desde el final de la Primera Guerra de Nagorno-Karabaj, los armenios destruyeron 700 lugares históricos y culturales, 700 bibliotecas, 85 institutos de arte y música, 22 museos que albergan más de 100.000 objetos, cuatro galerías de arte, cuatro teatros y dos salas de conciertos en todo el territorio del Cáucaso.
Khazar acusó además a Armenia de haber perpetrado crímenes de guerra.
“El ejército armenio, que se vio impotente ante nuestro ejército, no dudó en disparar contra civiles en ciudades que ni siquiera estaban en la zona de guerra”, afirmó. “Como resultado, 100 de nuestros ciudadanos murieron, 416 resultaron heridos y se causaron importantes daños a la infraestructura civil”.
Según Aryeh Gut, experto en los lazos entre Israel y Azerbaiyán y director ejecutivo de la Casa de Azerbaiyán en Israel, Bakú y Jerusalén han reforzado sus lazos gracias a una estrecha cooperación en los campos de la agricultura, la medicina y la defensa, entre otros.
Gut declaró a Israel Hayom que “Israel fue uno de los primeros países en reconocer a un Azerbaiyán independiente. Ningún país de Eurasia ha sido más amigo de Israel que Azerbaiyán”.
Señaló que “Israel es uno de los compradores estratégicos de petróleo azerbaiyano. Tras la liberación de los territorios ocupados, en la que Israel desempeñó un papel fundamental, las figuras israelíes están muy interesadas en invertir en esos territorios de Nagorno-Karabaj, junto con la asistencia médica que ya ha prestado Israel a las víctimas de la guerra”.
Micky Aharonson, experto en relaciones internacionales del Instituto de Estrategia y Seguridad de Jerusalén, explicó que “la totalidad de los intereses que hacen que sea importante para Israel mantener los lazos con Azerbaiyán no han cambiado”.
“Se trata de un país musulmán que hace frontera con Irán”, dijo. “Durante años, Israel ha mantenido buenos lazos con ellos, incluidos los económicos. No hay necesariamente una conexión entre las empresas privadas que participan en la rehabilitación y los lazos estratégicos entre los países”.