El ministro de Asuntos Exteriores Israel, Yisrael Katz, confirmó el domingo que ha estado promoviendo tratados de no agresión con varios países árabes en el Golfo, una gestión “histórica” que, según dijo, podría poner fin al conflicto entre Jerusalén y esos Estados.
“Recientemente he estado promoviendo, con el apoyo del primer ministro, una iniciativa diplomática para firmar ‘acuerdos de no agresión’ con los Estados árabes del Golfo”, escribió Katz en Twitter.
“Es un paso histórico que pondrá fin al conflicto y permitirá la cooperación civil hasta la firma de acuerdos de paz”, dijo, en lo que pareció ser un reconocimiento tácito de que ningún país árabe está dispuesto actualmente a establecer relaciones diplomáticas plenas con el Estado judío mientras el conflicto israelí-palestino siga sin resolverse.
Katz confirmó además que presentó su plan a varios ministros de relaciones exteriores árabes durante su visita a Nueva York la semana pasada al margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas. También discutió la propuesta con el enviado especial saliente de la administración de Estados Unidos para el proceso de paz, Jason Greenblatt, dijo Katz.
“Seguiré trabajando para fortalecer la posición de Israel en la región y en todo el mundo”, prometió.
El tweet de Katz incluía un enlace a un reportaje emitido el sábado por la noche por Canal 12, que reveló por primera vez la existencia de una iniciativa potencialmente innovadora.
El informe de televisión, que no citó una fuente, dijo que el acuerdo está diseñado para proporcionar relaciones bilaterales amistosas, cooperación en una variedad de campos, y ninguna guerra o incitación, ya que tanto Israel como los Estados del Golfo se enfrentan a un Irán cada vez más beligerante.
El 23 de septiembre, Katz twitteó que había mantenido conversaciones con un homólogo anónimo de un país árabe con el que Israel no tiene relaciones formales, y dijo que discutieron sobre “formas de hacer frente a la amenaza iraní” y un proceso para impulsar la “cooperación civil”.
Katz estuvo de acuerdo con sus interlocutores del Golfo Árabe durante “una serie de reuniones” en Nueva York para establecer equipos de trabajo que llevaran adelante el pacto de no agresión, según el informe de televisión.