El jueves, Jordania amenazó con revisar sus relaciones con Israel si el Estado judío presentaba planes controvertidos para aplicar su soberanía sobre partes de Judea y Samaria.
“No estaremos de acuerdo con las medidas unilaterales de Israel para “anexar” tierras palestinas, y nos veremos obligados a revisar todos los aspectos de nuestras relaciones con Israel”, dijo el Primer Ministro Omar al-Razzaz a la agencia oficial de noticias Petra.
El acuerdo de coalición, que sustenta al nuevo gobierno de unidad israelí y que juró el domingo, le permite iniciar medidas a partir del 1 de julio para implementar el controvertido plan de paz del presidente estadounidense Donald Trump para resolver el conflicto israelí- palestino.
Este plan, rechazado por los palestinos, da luz verde a Washington e Israel para la soberanía israelí sobre los poblados judíos y el Valle del Jordán, una franja de tierra que se extiende a lo largo de la frontera jordana.
Los palestinos dicen que el plan de EE.UU. ha puesto fin a las perspectivas de décadas de una solución de dos Estados para el conflicto con Israel.
Razzazz culpó a Israel de aprovechar el hecho de que el mundo se había “distraído” por la crisis del coronavirus para aplicar “medidas unilaterales sobre el terreno”.
Sus comentarios se produjeron pocos días después de que el Rey Abdullah II de Jordania advirtiera que si Israel “realmente aplica su soberanía en julio, ello daría lugar a un conflicto masivo con el Reino Hachemita de Jordania”.
El Rey Abdullah dijo a la revista alemana Der Spiegel que “no quiero amenazar y crear una atmósfera de leñador, pero estamos considerando todas las opciones”.
Otros países también se oponen a la soberanía israelí, entre ellos la mayoría de la Unión Europea, que advirtió que esto podría afectar a los vínculos de Israel con el bloque.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, dijo el martes que rechaza todos los acuerdos con Israel y los EE.UU. en respuesta a los planes de soberanía.
Fuentes israelíes confirmaron el jueves que el líder palestino está implementando una medida que a menudo es amenazadora, congelando un mecanismo vital de cooperación en materia de seguridad considerado fundamental para poner fin a la violencia en Judea y Samaria.
Además de la cooperación en materia de seguridad e inteligencia entre el ejército israelí y las fuerzas de seguridad palestinas, también deberían cesar los vínculos civiles entre Israel y la Autoridad Palestina.
“La aplicación de la soberanía por parte de Israel de cualquier parte de Judea y Samaria supone una amenaza existencial para el proyecto nacional palestino y para el fin de la solución de los dos Estados”, dijo el jueves el Primer Ministro de la Autoridad Palestina, Mohammad Shtayyeh, a los jefes de seguridad palestinos, según la agencia oficial de noticias Wafa de la Autoridad Palestina.
Jordania es el único estado árabe, aparte de Egipto, que tiene un tratado de paz formal con Israel. A pesar del acuerdo de 1994, las relaciones han sido tensas en los últimos años.
Las encuestas de opinión han encontrado repetidamente que el tratado tiene la abrumadora oposición de los jordanos, más de la mitad de los cuales son de origen palestino.