El primer ministro libanés, Najib Mikati, ha pedido a su ministro de Asuntos Exteriores que pida aclaraciones a la comunidad internacional después de que Israel concediera al grupo estadounidense de servicios petrolíferos Halliburton un contrato de perforación en alta mar en el Mediterráneo.
Líbano e Israel se disputan la delimitación de sus aguas territoriales en el Mediterráneo y las negociaciones entre los antiguos enemigos podrían llevar a Líbano a desbloquear valiosas reservas de gas en medio de su peor crisis financiera.
Los dos países mantienen desde octubre conversaciones intermitentes con la mediación de Estados Unidos para intentar resolver la cuestión.
“No daremos marcha atrás en este asunto ni renunciaremos a los derechos de los libaneses”, declaró Mikati en un comunicado emitido por su oficina.
El ministro de Asuntos Exteriores, Abdallah Bou Habib, se ha puesto en contacto con el representante permanente de Líbano ante la ONU, la embajada de Estados Unidos y otros países que apoyan las conversaciones marítimas para asegurarse de que el contrato de Halliburton no implique trabajos en las zonas en disputa, según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Las autoridades israelíes no estaban disponibles de inmediato para hacer comentarios.
El contrato de Halliburton se adjudicó tras una campaña anterior de perforación de cuatro pozos en alta mar frente a la costa de Israel.