El miércoles por la mañana, después de que los resultados de las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024 confirmaran la victoria de Donald Trump sobre Kamala Harris, líderes y políticos israelíes comenzaron a felicitar al expresidente republicano por su rotunda victoria.
El primer ministro Benjamin Netanyahu fue el primero en felicitar a Trump, incluso antes de que los medios declararan formalmente su triunfo. En un mensaje escrito en inglés, Netanyahu le expresó: “¡Felicitaciones por la mayor remontada de la historia!”. En el comunicado, resaltó: “Su histórico regreso a la Casa Blanca representa un nuevo comienzo para Estados Unidos y un poderoso compromiso renovado con la gran alianza entre Israel y Estados Unidos. ¡Es una enorme victoria!”. Para finalizar, Netanyahu añadió: “Con verdadera amistad”.
Este resultado electoral ha sido un alivio para la coalición de Netanyahu, que había tenido desacuerdos con la administración demócrata del presidente Joe Biden en temas como la guerra en Gaza y Líbano, que comenzó el 7 de octubre del año pasado con un ataque liderado por Hamás al sur de Israel. El gobierno de Biden había criticado abiertamente la gestión de Israel en la guerra, señalando la magnitud del sufrimiento humanitario en Gaza y la tendencia de Netanyahu a optar por la escalada en lugar de buscar una resolución pacífica.
Durante su mandato de 2017 a 2021, Netanyahu y Trump mantuvieron una relación cercana, con logros como el traslado de la embajada de EE. UU. a Jerusalén, la retirada del acuerdo nuclear con Irán, el reconocimiento de la soberanía israelí sobre los Altos del Golán y los Acuerdos de Abraham. Sin embargo, esta relación se deterioró cuando Netanyahu reconoció la victoria de Biden sobre Trump en las elecciones presidenciales de 2020. A partir de ahí, Trump acusó a Netanyahu de ser un obstáculo para la paz con los palestinos.
En los últimos meses, sin embargo, las tensiones entre ambos parecen haberse aliviado. Trump y Netanyahu se reunieron en julio en el resort de Mar-a-Lago de Trump, y han mantenido varias conversaciones telefónicas desde entonces. Con la guerra en Gaza en su segundo año, Trump ha expresado su deseo de poner fin al conflicto, afirmando que demasiadas vidas se han perdido y que Israel debería actuar rápidamente para ponerle fin.
Trump reiteró su postura en su discurso de victoria el martes por la noche: “No voy a iniciar guerras, voy a detener guerras”. Este mensaje reafirmó su compromiso con la resolución de conflictos de manera rápida y eficiente.
Poco después de conocerse los resultados, el presidente de Israel, Isaac Herzog, felicitó a Trump por su “regreso histórico a la Casa Blanca” y lo calificó como “un verdadero y querido amigo de Israel, y un defensor de la paz y la cooperación en nuestra región”. Herzog expresó su esperanza de seguir trabajando para fortalecer la relación entre ambos países y construir un futuro de paz y seguridad para Oriente Medio.
Varios miembros del gobierno israelí también felicitaron a Trump. El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, publicó en Twitter: “Dios bendiga a Israel, Dios bendiga a Estados Unidos”. Itamar Ben-Gvir, ministro de Seguridad Nacional, expresó en X: “Síííí, Dios bendiga a Trump”. Por su parte, el presidente de Nueva Esperanza, Gideon Sa’ar, calificó la victoria de Trump como “verdaderamente histórica” y resaltó su compromiso con la seguridad de Israel.
El ministro de Asuntos Exteriores entrante, Israel Katz, también felicitó a Trump, destacando la importancia de fortalecer la alianza entre Israel y EE. UU. y de mantener la firmeza contra las amenazas de Irán. El líder del partido Unidad Nacional, Benny Gantz, subrayó que Trump ha demostrado ser un “verdadero amigo de Israel” no solo con sus palabras, sino también con acciones concretas, como la negociación de los Acuerdos de Abraham, el reconocimiento de los Altos del Golán y el traslado de la embajada estadounidense a Jerusalén.
Por último, Meir Porush, ministro de Asuntos de Jerusalén y Patrimonio Judío, destacó que Trump, durante su mandato anterior, demostró ser un “verdadero amigo del pueblo judío y de Jerusalén”, expresando su esperanza de que continúe en esa línea durante su próximo mandato. Israel Ganz, líder de los colonos y presidente del consejo Yesha de Judea y Samaria, también manifestó su apoyo, resaltando la importancia de tener un aliado incondicional en la lucha contra las amenazas globales.