Al menos 6.300 agentes de policía y otras fuerzas de seguridad fueron desplegados en Jerusalén antes de la llegada de dignatarios de alto nivel, entre ellos el presidente ruso Vladimir Putin, el vicepresidente de Estados Unidos Mike Pence, y 49 países, entre ellos 41 jefes de Estado, el evento diplomático está destinado a convertirse en el más grande de la historia del país.
El evento de dos días, que incluye reuniones políticas entre líderes mundiales e israelíes donde se espera que se lleven a cabo discusiones sobre las últimas tensiones en Irán y el proceso de paz en Medio Oriente, culminará con una ceremonia de conmemoración en el museo y memorial del Holocausto de Yad Vashem el jueves por la tarde.
Al menos 6.300 oficiales de policía y otras fuerzas de seguridad fueron desplegados en Jerusalén para asegurar que el evento de 48 horas, que incluye a dignatarios de alto perfil como el presidente ruso Vladimir Putin, el vicepresidente estadounidense Mike Pence y el príncipe Carlos, se desarrolle sin problemas.
Emmanuel Macron, que llegó el martes poco antes de la medianoche, se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu y el presidente Reuven Rivlin en horas de la mañana.
Durante la reunión, el primer ministro instó al líder francés a que se uniera a Estados Unidos e Israel para presionar a Irán a que detenga su “actividad nuclear agresiva”.
Macron respondió que Francia será “inflexible” ante las ambiciones nucleares de Irán y que su país está decidido a que Teherán nunca adquiera armas nucleares.
Netanyahu dijo más tarde que ambos han acordado “establecer un diálogo estratégico” entre los dos países en un esfuerzo por promover intereses comunes.
Macron se reuniría con el presidente palestino Mahmoud Abbas en la ciudad de Ramala en Judea y Samaria poco después de las 4 de la tarde.
Rivlin está listo para recibir a las delegaciones en su residencia de Jerusalén el miércoles por la noche.
El jueves, Putin tiene programado inaugurar un memorial en honor a las víctimas del asedio de Leningrado, un prolongado bloqueo de la ciudad soviética por parte de las fuerzas nazis, en el Parque Sacher de Jerusalén.
A la ceremonia asistirán veteranos de la Segunda Guerra Mundial y sobrevivientes del asedio que viven en Israel. Se espera que una delegación de al menos 600 personas, en su mayoría de Rusia, llegue a Israel para la ceremonia.
El evento de este año, titulado “Recordando el Holocausto: Combatir el antisemitismo”, está organizado por el Foro Mundial del Holocausto en cooperación con Yad Vashem y el presidente Reuven Rivlin.