El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, criticó al presidente francés, Emmanuel Macron, por anunciar que Francia reconocerá formalmente un Estado palestino en septiembre durante una reunión de la ONU. Según Netanyahu, esa decisión ha incrementado el antisemitismo en Francia y fortalece a Hamás. En una carta enviada a Macron, a la que tuvo acceso AFP, el mandatario israelí instó a revertir esa postura antes del 23 de septiembre, fecha del Año Nuevo judío.
Netanyahu escribió que “su llamado a un Estado palestino echa combustible a este fuego antisemita. No es diplomacia, es apaciguamiento. Recompensa el terror de Hamás, endurece su negativa a liberar a los rehenes, envalentona a quienes amenazan a los judíos franceses y alienta el odio antijudío que recorre sus calles”. El jefe de gobierno pidió a Macron sustituir “la debilidad por acción” y actuar con determinación contra el antisemitismo.
El Palacio del Elíseo rechazó las acusaciones, calificándolas de “abyectas” y “erróneas”. Un comunicado oficial afirmó que Francia “protege y protegerá siempre a sus ciudadanos judíos” y advirtió que la carta “no quedará sin respuesta”. Según el ministro francés para Europa, Benjamin Haddad, Francia “no tiene lecciones que recibir en la lucha contra el antisemitismo” y el problema, que “envenena a las sociedades europeas”, no debe ser explotado políticamente.
De acuerdo con un recuento de AFP, al menos 145 de los 193 Estados miembros de la ONU ya han reconocido o planean reconocer a Palestina como Estado. Australia anunció a inicios de mes que formalizará ese reconocimiento en septiembre. Sky News informó que Netanyahu envió cartas similares al primer ministro australiano, Anthony Albanese, y a otros líderes que adoptarán esa decisión, señal de que su ofensiva diplomática abarca varios países.
El martes, Netanyahu también atacó públicamente a Albanese, calificándolo como “un político débil que traicionó a Israel y abandonó a los judíos australianos” mediante un mensaje difundido desde la cuenta oficial de su oficina en X. Este enfrentamiento se produjo tras la cancelación, el lunes, de la visa del político israelí Simcha Rothman por parte de Australia, lo que generó tensión diplomática entre ambos gobiernos.
Rothman, miembro de la coalición de Netanyahu, tenía previsto participar en actos organizados por la Asociación Judía Australiana. Horas después de la cancelación de su visa, el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Gideon Sa’ar, anunció la revocación de las visas de los representantes australianos ante la Autoridad Palestina. En respuesta, la ministra australiana de Exteriores, Penny Wong, calificó esa medida como “una reacción injustificada” y afirmó que el gobierno de Netanyahu “aísla a Israel y socava los esfuerzos internacionales hacia la paz y una solución de dos Estados”.