En Florida, Benjamin Netanyahu habló con Donald Trump y sostuvo que “nunca hemos tenido un amigo como el presidente Trump en la Casa Blanca, ni de lejos. Creo que pueden juzgarlo, por la frecuencia de nuestras reuniones y por el contenido y la intensidad”.
El primer ministro también agregó que “Creo que Israel es muy afortunado de tener al presidente Trump liderando a Estados Unidos, y diré que liderando al mundo libre en este momento. No es solo la gran fortuna de Israel. Es la gran fortuna del mundo”.
Trump respondió que “Tenemos una gran relación” y recordó: “Fue un gran honor hablar ante sus líderes” en la Knéset en octubre, destacó el vínculo bilateral y subrayó la solidez del trato entre ambos gobiernos durante el encuentro público en Estados Unidos ese día allí.
Trump sostuvo lo siguiente sobre el liderazgo israelí y la fortaleza del país actual: “La relación ha sido extraordinaria, y Bibi es un hombre fuerte. Puede ser muy difícil en ocasiones, pero se necesita un hombre fuerte. Si tuvieran un hombre débil, no tendrían Israel”.
Con esa valoración, afirmó sobre la supervivencia del Estado y su fuerza actual frente al entorno regional según dijo entonces allí: “En este momento, Israel, con la mayoría de los demás líderes, no existiría hoy. Ahora son más fuertes que nunca”.