El primer ministro Benjamin Netanyahu anunció el domingo que el ministro de Transporte e Inteligencia, Israel Katz, se embarcará en una visita a Omán la próxima semana, días después de que el primer ministro hiciera su propio viaje al Sultanato la semana pasada en la primera reunión oficial entre los líderes de los países desde 1996.
Katz asistirá a una conferencia de transporte internacional en Mascate por invitación personal de su homólogo omaní y los organizadores de la conferencia, confirmó un portavoz del ministro.
Durante la visita, Katz presentará la iniciativa de transporte regional, que está avanzando conjuntamente con Netanyahu.
La iniciativa, llamada «Pistas para la paz regional», tiene como objetivo conectar el Mar Mediterráneo y el Golfo Pérsico por ferrocarril a través de Israel como un puente terrestre y Jordania como un centro de transporte regional.
Esta es la primera vez que un ministro israelí ha sido invitado formalmente a participar en una conferencia internacional en Omán, lo que refleja el fortalecimiento de los lazos entre los dos países.
Israel y Omán confirmaron el viernes el viaje de Netanyahu a Mascate, la primera visita de este tipo realizada por un líder israelí en 22 años. Israel y Omán no tienen relaciones diplomáticas formales.

Netanyahu con frecuencia se jacta de los lazos tras bambalinas con los países árabes. En otro signo de esos vínculos, la ministra de deportes de Israel, Miri Regev, estuvo en los Emiratos Árabes Unidos el domingo para un torneo internacional de judo.
El viernes por la tarde, la oficina de Netanyahu anunció inesperadamente que él y su esposa Sara acababan de regresar de una «visita diplomática oficial» a Omán, durante la cual se reunieron con el sultán Qaboos bin Said.
Una declaración de la Oficina del Primer Ministro calificó el viaje como «un paso significativo en la implementación de la política delineada por el Primer Ministro Netanyahu para profundizar las relaciones con los Estados de la región mientras se aprovechan las ventajas de Israel en materia de seguridad, tecnología y economía».
La última visita de un líder israelí a Omán tuvo lugar en 1996, cuando Shimon Peres visitó.
Los Netanyahus fueron invitados a Omán por el sultán, que ha estado gobernando el Estado del Golfo desde 1970, «después de largos contactos entre los dos países», dice el comunicado.
Una declaración conjunta emitida por Jerusalén y Mascate dijo que los dos líderes discutieron «formas de avanzar en el proceso de paz en el Medio Oriente, así como varios asuntos de interés conjunto con respecto al logro de la paz y la estabilidad en el Medio Oriente».