Un joven palestino enfrenta cargos por escupir a una oficial de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un autobús rumbo a Ramat Gan. La justicia decidió otorgarle arresto domiciliario, según Ynet, tras el pedido policial de mantenerlo detenido hasta el cierre del proceso judicial.
El juez Benyamin Hirschel-Doron, del Tribunal de Magistrados de Tel Aviv, emitió el fallo. Aunque expresó un profundo rechazo hacia el acto cometido, consideró que el acusado no representa un peligro suficiente para justificar una prisión preventiva extendida.
Ahmad Muhammad, de 24 años y originario de Huwara, Judea y Samaria, se presentó ante la policía el lunes por la noche. Su familia recibió una notificación policial sobre el incidente, lo que motivó su entrega. Las autoridades lo señalan como el responsable de escupir a una agente de las FDI el domingo por la mañana en un autobús con destino a Ramat Gan. Una cámara de seguridad captó el momento en que el joven descendió del vehículo tras el hecho.
Los cargos contra Muhammad incluyen agresión a un funcionario público y residencia ilegal en Israel. Sin embargo, el acusado niega los hechos y afirma que no se encontraba en Israel cuando ocurrió el incidente, alegando un error de identidad. La policía expresó su desacuerdo con la decisión judicial de otorgarle arresto domiciliario. Argumentan que el fallo debilita la capacidad de disuasión y podría avalar ataques contra militares uniformados.
Durante la audiencia, el abogado de Muhammad denunció que su cliente sufrió agresiones físicas por parte de la policía mientras estaba bajo custodia. El juez ordenó una investigación más exhaustiva sobre esta acusación.
El día anterior, las autoridades trasladaron a Muhammad desde un centro de detención penal a una instalación de seguridad, por disposición del jefe del Servicio Penitenciario, Kobi Yaakobi. Las imágenes del traslado muestran al sospechoso con los ojos vendados, escoltado por cuatro guardias enmascarados que lo conducen desde un camión hasta el centro de detención.