En un discurso desde Jerusalén mostrado en la Convención Nacional Republicana, grabado el lunes y emitido el martes por la noche, el Secretario de Estado de EE.UU. Mike Pompeo promocionó los logros de la administración Trump a favor de Israel.
“En el Medio Oriente, cuando Irán amenazó, el presidente aprobó un ataque que mató al terrorista iraní Qassem Soleimani, el hombre responsable del asesinato y la mutilación de cientos de soldados estadounidenses y miles de cristianos en todo el Medio Oriente”, dijo en el segundo día de la convención.
Soleimani, general de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, fue el objetivo de un ataque aéreo estadounidense el 3 de enero en el Aeropuerto Internacional de Bagdad.
“Todos recordarán que cuando el presidente asumió el cargo, los terroristas islámicos radicales habían decapitado a los estadounidenses e ISIS controlaba un territorio del tamaño de Gran Bretaña”, dijo Pompeo. “Hoy, debido a la determinación y liderazgo del presidente, el califato de ISIS ha sido aniquilado, su malvado líder Abu Bakr Bagdadi ha muerto, y nuestros valientes soldados están de camino a casa”.
Al-Baghdadi fue asesinado por las fuerzas de EE.UU. en el noroeste de Siria en octubre de 2019.
Pompeo también dijo: “El presidente retiró a EE.UU. del desastroso acuerdo nuclear con Irán y exprimió al Ayatolá, Hezbolá y Hamás”.
Y, señaló desde la azotea del Hotel King David, “el presidente trasladó la embajada de EE.UU. a esta misma ciudad de Dios, Jerusalén, la capital legítima de la patria judía”. Los Estados Unidos trasladaron la embajada en mayo de 2018, cinco meses después de reconocer Jerusalén como la capital de Israel.
Por último, señaló la reciente normalización de las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos, mediada por los Estados Unidos y anunciada el 13 de agosto.
El discurso de Pompeo después de un día de reunión con altos funcionarios israelíes, incluyendo el Primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu y el Secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido Dominic Raab, tuvo una reacción inmediata.
Los demócratas, incluyendo los judíos, lo criticaron por romper el protocolo y usar su posición oficial para un evento de campaña republicana, aunque el Departamento de Estado de los EE.UU. dijo que fue hecho en una “capacidad privada” y que no se usó el dinero de los contribuyentes.
Los críticos también señalaron la explotación de Israel como una cuestión de “cuña” y por politizar lo que debería ser, al menos en teoría, una cuestión de consenso bipartidista.
El diputado Joaquín Castro (D-Texas), vicepresidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, calificó el discurso de “muy inusual”.
En una carta al diputado de Pompeo, Stephen Biegun, ha solicitado una lista de los gastos del viaje de Pompeo a Oriente Medio, incluyendo “recibos que demuestren que cualquier gasto incurrido por el Departamento de Estado fue reembolsado” por el Comité Nacional Republicano.