Trump advierte a Israel que no desestabilice Siria tras una incursión militar israelí en el sur sirio que dejó muertos y heridos.
Trump condiciona su respaldo a Israel y pide diálogo con Damasco hoy
Donald Trump advirtió a Israel que no desestabilice Siria ni interfiera en su evolución política. Difundió el mensaje en Truth Social días después de una incursión del ejército israelí en Beit Jin, en el sur de Siria, con un saldo de al menos trece personas muertas y seis soldados israelíes heridos. El exhorto apuntó a frenar acciones que agraven la situación en un país que atraviesa fase de transición tras la caída del régimen anterior.
En la publicación, Trump sostuvo que Israel debe mantener un diálogo fuerte y verdadero con las autoridades de Damasco y evitar acciones que, a su juicio, impidan que Siria se convierta en un Estado próspero. Afirmó satisfacción con el desempeño del presidente Ahmed al-Sharaa y señaló apoyo a la hoja de ruta para la reconstrucción. Unas relaciones estables entre Siria e Israel favorecerían una paz más amplia, con el alto el fuego en Gaza como marco.
El llamamiento llegó casi un año después del derrocamiento de Bashar al-Asad por una coalición rebelde encabezada por Hayat Tahrir al-Sham, y cuando se cumplía aproximadamente un año de la designación de Ahmed al-Sharaa para un periodo transitorio. El antiguo comandante de HTS y exinsurgente en Siria e Irak asumió el liderazgo del Estado tras una ofensiva que permitió a las facciones rebeldes tomar Damasco y puso fin a más de medio siglo de dominio familiar.

El 29 de enero, la autodenominada Comandancia general anunció su nombramiento como presidente para la fase de transición, suspendió la Constitución y disolvió el Parlamento, el antiguo ejército y los principales servicios de seguridad. También le otorgó potestad para formar un consejo legislativo provisional. En sus primeros discursos, Al-Sharaa definió un programa de unidad nacional, reconstrucción económica y justicia transicional, y estimó que la elaboración constitucional y las elecciones podrían requerir entre cuatro y cinco años.
Claves del mensaje de Trump y de la operación en Beit Jin
- La incursión ocurrió el 28 de noviembre en Beit Jin, al suroeste de Damasco.
- Balance sirio: al menos 13 muertos y más de 20 heridos, con menores entre las víctimas.
- Seis soldados israelíes resultaron heridos, tres de gravedad, según el ejército.
- Objetivo declarado: detener a presuntos miembros de Jamaa Islamiya con base en Líbano.
- Reuniones Trump–Al-Sharaa en Washington: 10 y 11 de noviembre en la Casa Blanca.
Detalles de la incursión de Beit Jin y las reacciones oficiales clave
La advertencia llegó menos de un mes después de la primera visita de un jefe de Estado sirio a la Casa Blanca. El 10 y 11 de noviembre, Ahmed al-Sharaa se reunió con Trump en Washington. Dialogaron sobre una retirada de sanciones, la integración de Siria en iniciativas contra grupos armados y garantías en las fronteras, incluida la línea de separación en los Altos del Golán. Trump elogió al dirigente y presentó su llegada como oportunidad.
La operación israelí precedente al mensaje ocurrió la madrugada del 28 de noviembre en Beit Jin, en la campiña al suroeste de Damasco, cerca de la frontera con posiciones israelíes. Según autoridades y residentes, tropas israelíes entraron en el pueblo y hubo enfrentamientos con hombres armados y vecinos que intentaron impedir arrestos. También hubo uso de helicópteros, vehículos aéreos no tripulados y artillería, con al menos trece muertos y más de veinte heridos.

El ejército israelí explicó que el objetivo fue detener a presuntos integrantes de Jamaa Islamiya, un grupo islamista con base en Líbano al que vincula con planes de ataques contra territorio israelí. El mando afirmó que tropas recibieron fuego y respondieron con apoyo aéreo. Confirmó seis soldados heridos, tres de gravedad. Las fuerzas anunciaron detenciones de varios sospechosos, afirmaron bajas no precisadas de hombres armados y mantuvieron efectivos desplegados en la zona en días posteriores.
Damasco calificó la incursión de Beit Jin como un ataque criminal y un crimen de guerra, y denunció que los bombardeos alcanzaron viviendas y obligaron a vecinos a huir hacia localidades cercanas. El Ministerio de Exteriores reclamó una respuesta del Consejo de Seguridad de la ONU e instó a organismos internacionales a asumir responsabilidades ante violaciones de la soberanía del país y de áreas que, antes de la guerra, permanecían bajo supervisión de fuerzas de paz.
Presencia israelí al sur de Siria y exigencias de Al-Sharaa para acuerdo
La ofensiva de Beit Jin formó parte de una serie de operaciones israelíes en el sur de Siria tras la caída del régimen de Asad. Desde finales de 2024, Israel controla una franja de unos cuatrocientos kilómetros cuadrados al otro lado de la línea del Golán, con puestos militares e incursiones periódicas, y ataques aéreos en otras zonas. Damasco califica esa presencia como ocupación; Israel la presenta como medida necesaria frente a grupos hostiles.
En este contexto, Ahmed al-Sharaa afirmó en varias intervenciones que cualquier avance en las relaciones con Israel requiere la retirada israelí del Golán y de zonas del sur ocupadas tras la caída de Asad. El presidente, de confesión suní y con pasado en organizaciones islamistas, descartó por ahora un acuerdo de normalización plena como los alcanzados por otros países árabes, aunque admitió contactos de seguridad indirectos con el fin de evitar incidentes en la frontera.

Pese a esas reservas, Trump promovió un entendimiento de seguridad entre Siria e Israel con compromisos de control fronterizo, coordinación frente a grupos armados y garantías sobre el despliegue de fuerzas aliadas de Damasco, en particular milicias respaldadas por Irán. En paralelo, Al-Sharaa busca el levantamiento de sanciones estadounidenses y europeas ligadas al antiguo régimen de Asad y a su historial en HTS, a cambio de avances en reconstrucción, retorno de desplazados y cooperación regional.
En el interior de Siria, el gobierno transitorio presentó iniciativas para reorganizar instituciones estatales y reconstruir el aparato de seguridad. Además de la disolución de la estructura baazista y de los servicios de inteligencia, Al-Sharaa ordenó la integración de facciones rebeldes en un nuevo ejército nacional. También anunció comités de justicia transicional y de investigación sobre violaciones graves ocurridas durante los años de conflicto, incluidos episodios de violencia sectaria en la costa mediterránea de mayoría alauí.
Agenda interna de seguridad y la proyección exterior de Al-Sharaa actual
Al-Sharaa intervino para abordar episodios de violencia recientes en regiones sensibles, en particular en la provincia de Latakia, donde se registraron enfrentamientos entre comunidades y ataques contra civiles alauíes. En un discurso televisado de marzo, anunció comisiones de investigación específicas para esos hechos y un alto comité encargado de mantener la paz social e incrementar la presencia estatal. Además, se comprometió a negar impunidad a quienes participaron en matanzas o abusos bajo el nuevo gobierno.
En el plano internacional, Al-Sharaa participó en foros como la Asamblea general de Naciones Unidas y, durante su visita a Washington, expresó disposición a cooperar con potencias occidentales y regionales pese a su trayectoria como comandante de una organización insurgente vinculada durante años a Al Qaeda. En esas intervenciones insistió en apoyo financiero para la reconstrucción, en la reintegración de Siria en organismos multilaterales y en la inclusión del país en coaliciones contra grupos armados rivales.

El mensaje de Trump formó parte de esfuerzos para mantener el alto el fuego en Gaza desde el 10 de octubre de 2025, acordado tras dos años de ofensiva israelí tras el ataque de Hamás de octubre de 2023. Desde la entrada de la tregua, miles de camiones de ayuda y combustible llegaron a la Franja, mientras Naciones Unidas advirtió sobre desplazados en condiciones precarias bajo tiendas y estructuras temporales dañadas por lluvias e inundaciones.
Trump vinculó la mejora de las relaciones entre Siria e Israel con la estabilidad de ese alto el fuego y con iniciativas diplomáticas destinadas a ampliar acuerdos de seguridad y reconocimiento entre Israel y otros actores regionales. Presentó el acercamiento como parte de un esfuerzo amplio para consolidar compromisos que reduzcan riesgos en las fronteras y faciliten la reintegración de Siria en marcos de cooperación con aliados occidentales y árabes, bajo condiciones verificables para las partes.
