El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, recibió el miércoles en el Pentágono al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Durante el encuentro, Hegseth resaltó los éxitos militares de Israel en la lucha contra Hamás en Gaza y Hezbolá en Líbano durante los últimos 15 meses.
El viaje de Netanyahu a Washington incluyó reuniones previas con el presidente Donald Trump y altos funcionarios de su gobierno. La cita con Hegseth marcó la primera reunión del secretario de Defensa con un líder extranjero desde que asumió el cargo el mes anterior.
Una banda militar interpretó el Hatikvah y el himno nacional de Israel al arribo de Netanyahu al Pentágono. Una guardia de honor del Cuerpo de Marines, portando la bandera israelí, lo esperaba para rendirle homenaje.
Hegseth reconoció la ofensiva israelí contra Hezbolá en Líbano, destacando la eliminación de su principal comandante militar, Fuad Shukr, en julio de 2024. Considerado mano derecha de Hassan Nasrallah, Shukr figuraba en la lista de los más buscados por Estados Unidos por su implicación en el atentado de 1983 contra un cuartel de los Marines en Beirut.
«Nosotros no olvidamos, ustedes tampoco», afirmó Hegseth. También subrayó la efectividad de Israel en la contención de Irán y sus aliados, acción que, según el Departamento de Defensa, ha degradado significativamente su capacidad operativa en los últimos 16 meses.
Las conversaciones abordaron la guerra en Gaza, desencadenada por la masacre del 7 de octubre de 2023, cuando terroristas de Hamás invadieron el sur de Israel, mataron a unas 1.200 personas y tomaron 251 rehenes, incluidos ciudadanos estadounidenses.
Hegseth reafirmó el respaldo estadounidense a la defensa de Israel y cuestionó la decisión de la administración Biden de retener un envío de bombas de 2.000 libras por el riesgo de su uso en zonas densamente pobladas de Gaza. Trump revocó la restricción tras su regreso al poder, y la Casa Blanca ahora prepara un nuevo paquete de armamento valorado en aproximadamente 1.000 millones de dólares.
«Proporcionamos municiones antes inaccesibles, que resultaron clave para eliminar a enemigos radicales», declaró Hegseth. Netanyahu, en respuesta, agradeció a Trump por garantizar el suministro bélico necesario para Israel.
Sobre la reciente afirmación de Trump de que Estados Unidos «tomaría el control» de Gaza, Hegseth evitó precisar si ello implicaría el despliegue de tropas. En su lugar, sostuvo que repetir las mismas estrategias sin éxito es una locura y que la administración actual busca soluciones innovadoras para problemas aparentemente insolubles.
Netanyahu fue el primer mandatario extranjero recibido por Hegseth tras su nombramiento, lo que reafirmó, según el secretario de Defensa, la alianza inquebrantable entre ambos países. También calificó a Israel como «un aliado ejemplar en Oriente Medio».
En su intervención, Netanyahu ratificó la determinación israelí de enfrentar a sus enemigos sin depender de terceros. «Estamos listos para asumir nuestra defensa y combatir a quienes representan una amenaza para Israel y Estados Unidos», aseguró.
Dirigiéndose a Hegseth, recordó la manera en que los extremistas los perciben. «A ustedes los llaman el Gran Satán y a nosotros el Pequeño Satán. Al luchar contra ellos, no solo nos protegemos a nosotros, sino también a ustedes», sostuvo. «Nuestra victoria es su victoria», añadió, resaltando los avances en los objetivos militares de Israel.
Además de su cita con Hegseth, Netanyahu se reunió con el vicepresidente JD Vance y el asesor de seguridad nacional Mike Waltz en Blair House. No se divulgaron detalles sobre esos encuentros.
El futuro de Gaza tras la guerra ha sido un tema central en la visita del primer ministro a Washington. Trump propone vaciar el enclave y transformarlo en «la Riviera del Medio Oriente». Egipto y Jordania rechazan acoger a los desplazados, argumentando que desestabilizaría la región y que los palestinos deben permanecer en su tierra, al igual que los israelíes.
En respuesta, Netanyahu valoró la disposición de Trump a plantear ideas disruptivas. «Dices lo que otros temen decir. Al principio se sorprenden, pero luego admiten que tienes razón», comentó durante su conferencia de prensa conjunta.
Este viaje marca la primera visita de un líder extranjero a la Casa Blanca desde el regreso de Trump. Pese a desacuerdos en el pasado, Netanyahu ha fortalecido su relación con el presidente republicano tras el deterioro de sus vínculos con Biden por la guerra en Gaza.
«Has sido el mejor amigo que Israel ha tenido en la Casa Blanca», afirmó Netanyahu. «¿Imaginas dónde estaremos en cuatro años?».