l domingo, Donald Trump afirmó que las negociaciones con Israel están progresando. De cara a los próximos encuentros con el primer ministro Benjamin Netanyahu y otros representantes, anticipó que se llevarán a cabo «grandes reuniones» tras la llegada del líder israelí a Washington.
«Las conversaciones sobre Medio Oriente con Israel y otros países avanzan», declaró Trump mientras se encontraba en la pista de la Base Conjunta Andrews en Maryland, donde el sonido de un motor a reacción resonaba de fondo.
Sin proporcionar detalles adicionales, sus declaraciones coincidieron con la reanudación de las negociaciones indirectas entre Israel y Hamás. Estas conversaciones buscan avanzar en la segunda fase del acuerdo de tres etapas que contempla un alto el fuego y la liberación de rehenes en Gaza.
«Bibi Netanyahu llegará el martes y tenemos previstas reuniones muy importantes», expresó Trump al referirse al primer ministro israelí por su apodo.
El itinerario podría sufrir modificaciones, pero se espera que el martes por la tarde, a las 6:00 p. m., Netanyahu se reúna con Trump. La agenda incluye una cena que probablemente se realice a las 9:00 p. m. También podrían llevar a cabo una conferencia de prensa y un encuentro con familiares de rehenes.
Las discusiones en Washington abordarán las condiciones que Netanyahu deberá aceptar para reactivar los esfuerzos de normalización con Arabia Saudita. Riad suspendió las negociaciones al inicio de la guerra en Gaza y endureció su postura, exigiendo una solución para la causa palestina antes de considerar cualquier acuerdo.
Desde su gabinete, Netanyahu enfrenta una fuerte presión para retomar la guerra. El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, ha advertido que renunciará, lo que privaría al primer ministro de su mayoría en la Knéset.
Hamás, que recuperó el control sobre Gaza desde el inicio del alto el fuego, ha condicionado la liberación de rehenes a la finalización de la guerra y a la retirada de las tropas israelíes.
Por su parte, Netanyahu ha reiterado el compromiso de Israel con la victoria sobre Hamás y el rescate de todos los rehenes capturados en el ataque del 7 de octubre de 2023, el cual desató la guerra.
Trump ha respaldado a Israel de manera constante, aunque también ha prometido poner fin a los conflictos en Medio Oriente. Ha resaltado su papel en la negociación del acuerdo de alto el fuego, que permitió la liberación de 13 rehenes en Gaza y de cinco ciudadanos tailandeses en un acuerdo separado. A cambio, Israel excarceló a cientos de terroristas palestinos presos.
El encuentro del martes será la primera reunión de Trump con un líder extranjero desde su regreso a la Casa Blanca en enero. Netanyahu describió la prioridad de la reunión como un gesto significativo.
«Esto demuestra la fortaleza de la alianza entre Israel y Estados Unidos», comentó antes de abordar su vuelo desde Israel.
En Washington, Netanyahu fue recibido por el embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, quien destacó que la reunión reforzará la cooperación entre ambos países.
El miércoles, Netanyahu sostendrá un encuentro con el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el jueves se reunirá con los líderes del Congreso, incluido el líder de la mayoría del Senado y el presidente de la Cámara de Representantes.
Es probable que durante su estancia conceda una entrevista a un medio de comunicación estadounidense.
Antes de la reunión con Trump, el lunes se reunirá con el enviado especial de Estados Unidos para Medio Oriente, Steve Witkoff. Entretanto, esta semana continuarán las conversaciones indirectas entre Israel y Hamás.
El acuerdo de alto el fuego, que tiene una duración de 42 días, ha entrado en su tercera semana. Como parte de este pacto, Hamás liberará a 33 rehenes en fases sucesivas, mientras que Israel excarcelará a unos 1.900 palestinos, entre ellos varios condenados por ataques letales contra israelíes.
Además del cese temporal de los combates, la tregua ha facilitado el ingreso de suministros de alimentos, combustible y asistencia médica a Gaza. También ha permitido el regreso gradual de palestinos desplazados al norte del enclave.
La siguiente fase del acuerdo prevé la liberación del resto de los rehenes y abrirá el diálogo sobre una solución definitiva al conflicto. La población israelí y los familiares de los secuestrados exigen avances inmediatos.
«El dolor que soportan las familias en esta espera es insoportable», expresó Nissan Kalderon, hermano de Ofer Kalderon, un rehén recién liberado.
Durante el ataque del 7 de octubre de 2023, Hamás lideró la incursión de miles de combatientes en el sur de Israel, provocando la muerte de 1.200 personas y secuestrando a 251. De estos, 76 continúan retenidos en Gaza, incluidos 34 que, según el ejército israelí, han muerto.
Las autoridades de Gaza, bajo el control de Hamás, aseguran que los enfrentamientos han causado más de 46.000 muertes o desapariciones. Sin embargo, estos datos no pueden verificarse de manera independiente y no diferencian entre civiles y combatientes. Según Israel, hasta enero, sus fuerzas han eliminado a unos 20.000 combatientes en Gaza y a 1.000 atacantes en el asalto del 7 de octubre.
Israel sostiene que busca minimizar las bajas civiles y acusa a Hamás de utilizar a la población de Gaza como escudos humanos, operando desde viviendas, hospitales, escuelas y mezquitas.
Si bien Joe Biden, antecesor de Trump, mantuvo el apoyo militar y diplomático a Israel, también intentó distanciarse del elevado número de víctimas y de las restricciones a la asistencia humanitaria.
En contraste, Trump ha impulsado un giro en la política estadounidense. Al asumir nuevamente la presidencia, eliminó sanciones impuestas a colonos israelíes acusados de violencia contra palestinos y, según informes, aprobó el envío de bombas de 2.000 libras que la administración Biden había bloqueado.