Hablando en el aeropuerto Ben Gurion tras su visita de dos días a Israel, el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, expresó que la votación preliminar de ayer en la Knéset sobre la anexión de Judea y Samaria lo ofendió y consideró que fue “muy estúpida”.
Al comentar sobre la votación, Vance señaló que le parecía “extraña” y añadió que estaba “un poco confundido por eso” al recibir preguntas de los periodistas.
Vance indicó que le explicaron que la medida era un “truco político, que no tenía ningún significado práctico” y que era “puramente simbólico”, pero advirtió que “si era un truco político, era un truco político muy estúpido, y personalmente me siento un insulto por ello”.
“Judea y Samaria no va a ser anexada por Israel”, afirmó. Subrayó que “la política de la administración Trump es que Judea y Samaria no será anexada por Israel. Esa seguirá siendo nuestra política, y si la gente quiere tomar votos simbólicos, puede hacerlo, pero ciertamente no estábamos contentos con eso”.
Consultado sobre el alto el fuego en Gaza, Vance declaró que “en este momento, podemos decir con confianza que Israel está respetando el alto el fuego, Hamás está respetando el alto el fuego”.
Reconoció la existencia de excepciones: “Hay pequeñas excepciones que surgen aquí y allá. Eso sería de esperar cuando estas partes han estado en guerra durante dos años. Pero hasta ahora, el alto el fuego se mantiene, la paz se mantiene y ahora estamos tratando de averiguar cómo hacer que se mantenga a largo plazo”.
“Nuestro mensaje es: hagan todo lo que puedan para trabajar con nosotros para que esta paz se mantenga”, dijo a Israel, insistiendo en la cooperación de todas las partes involucradas.
Sobre la nueva Fuerza de Seguridad Internacional, Vance explicó que “ahora va a tomar la iniciativa para desarmar a Hamás”.
Agregó que “eso va a llevar algún tiempo, y va a depender mucho de la composición de esa fuerza. Hay ciertos países que espero que sean bastante buenos en eso, y hay otros países que pueden desempeñar un papel, pero no creo que sean tan útiles. Pero mucho de eso depende de qué fuerzas realmente se presenten y cómo podamos implementar la fase dos del plan de paz”.
Al ser consultado sobre posibles contactos con Hamás, Vance afirmó: “Siempre podemos levantar el teléfono y llamar a Hamás, al menos a través de un intermediario, cuando queramos. Pero la mayor parte de nuestra comunicación ha sido con nuestros amigos árabes del Golfo y, por supuesto, con los israelíes sobre cómo será esta fuerza de seguridad internacional. Esa no es principalmente una conversación de Hamás. Esa es una conversación entre nosotros, los saudíes, los emiratíes, los qataríes y otras personas que van a estar involucradas en esto de una forma u otra”.