El miércoles, Estados Unidos impuso sanciones a una red de transporte marítimo que, según dijo, estaba dirigida por la Guardia Revolucionaria de Irán, y que vendió millones de barriles de petróleo en beneficio del presidente de Siria, Bashar al-Assad.
Las sanciones a 16 entidades, 10 personas y 11 buques se anunciaron justo cuando Irán amenazaba con reducir aún más sus compromisos en el marco de un acuerdo nuclear, a menos que Estados Unidos alivie su presión.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. dijo que la Fuerza Quds, una unidad de la élite de la Guardia Revolucionaria responsable de las operaciones externas, había apoyado tanto a Assad como a su aliado libanés Hezbolá a través de envíos de petróleo crudo, principalmente a Siria.
“El régimen iraní está utilizando una organización terrorista como su principal conducto para ofuscar y vender cientos de millones de dólares de petróleo ilícito para alimentar su nefasta agenda”, dijo Sigal Mandelker, subsecretario del Tesoro para el terrorismo y la inteligencia financiera.
El Departamento de Estado dijo por separado que ofrecía una recompensa de 15 millones de dólares por información que puede perturbar los mecanismos financieros de la Guardia Revolucionaria, incluida la Fuerza Quds.
Israel ha acusado recientemente a los líderes de la Fuerza Quds de planear atacar al Estado judío con drones kamikaze desde Siria, en un complot que dijo que frustró con ataques aéreos.
Las entidades que se enfrentan a las nuevas sanciones son el Grupo Mehdi, con sede en la India, aliado de Estados Unidos, y su director Ali Zaheer Mehdi, que según el Departamento del Tesoro ha gestionado buques para el petróleo iraní.
El domingo, un petrolero iraní perseguido por Estados Unidos a través del Mar Mediterráneo se detuvo cerca de la costa de Siria, donde el principal diplomático de Estados Unidos afirma que será descargado a pesar de las negaciones de Teherán.
La saga en curso del petrolero Adrian Darya 1, antes conocido como el Grace 1, llega cuando las tensiones siguen siendo altas entre los EE.UU. e Irán por su acuerdo nuclear con las potencias mundiales.
El sitio web de rastreo de barcos MarineTraffic.com mostró que Adrian Darya se detuvo el domingo a unas 50 millas náuticas (92 kilómetros) de Siria. El sistema de identificación automática del buque no muestra su destino después de que sus marineros a bordo lo hayan clasificado previamente como puertos en Grecia y Turquía. El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía sugirió en un momento dado que iría al Líbano, algo que negó un funcionario libanés.
Estados Unidos ha estado advirtiendo a los países que no acepten el Adrian Darya, que transporta 2.1 millones de barriles de crudo por valor de unos 130 millones de dólares.
Irán va a romper aún más los términos del acuerdo nuclear del viernes si Europa no le ofrece una forma de vender su petróleo crudo en el mercado mundial. Los EE.UU. bajo el presidente Donald Trump se retiraron unilateralmente del acuerdo hace más de un año e impusieron sanciones a Irán que están golpeando su economía.