Alemania planea introducir una tasa para todos sus consumidores de gas a partir de octubre, ya que el gobierno busca evitar una ola de empresas importadoras y comercializadoras de gas que colapsen en medio de los precios récord del gas natural, según un nuevo proyecto de ley visto por Reuters el jueves.
Rusia está reduciendo aún más los flujos a través de Nord Stream esta semana, a solo el 20 % de la capacidad del gasoducto, días después de reiniciar el enlace al 40 % de su capacidad tras el mantenimiento regular.
El Gobierno alemán ya ha intervenido para rescatar al grupo energético Uniper, el mayor comprador de gas ruso en Alemania. Uniper -y muchos otros comerciantes y proveedores de gas alemanes- se han visto afectados por la reducción del suministro ruso y la subida de los precios del gas no ruso. Alemania y Uniper acordaron la semana pasada un paquete de rescate de 15.000 millones de dólares, que incluye la toma de una participación del 30 % por parte del gobierno alemán en la empresa y la puesta a disposición del grupo de más liquidez y líneas de crédito.
Según los planes del gobierno, todos los consumidores de gas, incluidos los hogares, tendrán que pagar una tasa adicional, que se destinará a apoyar a las empresas importadoras de gas de Alemania, que luchan contra la falta de gas ruso y los precios desorbitados de las alternativas no rusas. Los detalles del proyecto de ley se anunciarán el mes que viene.
Se espera que los hogares y los consumidores industriales paguen la tasa hasta septiembre de 2024, según el borrador que ha visto Reuters.
“No se sabe exactamente cuánto costará (el gas) en noviembre, pero la amarga noticia es que definitivamente son unos cientos de euros por hogar”, dijo el jueves el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, citado por Reuters.
Marcel Fratzscher, presidente del Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW), declaró al periódico Rheinischen Post de Düsseldorf que los hogares alemanes deberían prepararse para que los costes de la calefacción por gas se tripliquen como mínimo. La tasa debería ir acompañada de un paquete de ayudas para los hogares con menos ingresos, pues de lo contrario el nuevo gravamen podría provocar una “catástrofe social”, añadió Fratzscher.