Un nuevo sondeo revela que alrededor de tres cuartas partes de los israelíes judíos apoyan la ampliación de las operaciones de las FDI en Rafah, la ciudad más meridional de Gaza, donde se refugian más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes de la Franja en medio de la actual guerra con Hamás, mientras que dos tercios de los encuestados árabes no están de acuerdo.
El desglose por orientación política de la encuesta del Instituto Israelí para la Democracia muestra que el 45% de los encuestados judíos que se identifican como de izquierdas apoyan esa medida, mientras que los de centro y derecha la respaldan en mucha mayor medida.
La encuesta también revela que los israelíes están divididos en cuanto a la posición de Jerusalén en la escena internacional. “La proporción de encuestados árabes que califican de negativa la situación internacional de Israel (63%) es mayor que la proporción equivalente de encuestados judíos (44%)”, afirma el IDI.
En cuanto a las relaciones entre Israel y EE. UU., la encuesta indica que la opinión pública está dividida sobre si el Estado judío puede seguir contando con el apoyo de Washington. Alrededor del 40% opina que totalmente o en gran medida, el 34% opina que moderadamente y el 20% se muestra pesimista sobre la continuidad del apoyo de Washington.
En cuanto a los cambios previstos en las exenciones del servicio militar para los haredim, un tema candente en Israel en estos momentos, una gran parte de los encuestados judíos (70%) cree que deberían introducirse cambios en la exención concedida a los haredim, y la cifra es aún mayor (86%) entre los encuestados judíos laicos. Pero solo el 19% de los haredies encuestados se muestran favorables a los cambios.