La agencia de calificación crediticia Fitch ha degradado la calificación crediticia de Israel de A+ a A, con una perspectiva “Negativa”. La decisión se debe a la posibilidad de que la guerra en Gaza se extienda hasta 2025, además de la amenaza de que la guerra se expanda a otros frentes.
Según un comunicado de prensa de Fitch, “la rebaja a ‘A’ refleja el impacto de la prolongación de la guerra en Gaza, el aumento de los riesgos geopolíticos y las operaciones militares en múltiples frentes”.
Además, la agencia advierte sobre las consecuencias para las finanzas públicas del país, proyectando un déficit presupuestario del 7,8% del PIB para 2024 y una deuda pública que se mantendrá por encima del 70% del PIB en el mediano plazo. También anticipa un deterioro en los indicadores de gobernanza del Banco Mundial, lo que afectaría el perfil crediticio de Israel.
En cuanto a la perspectiva “Negativa”, Fitch explica: “Consideramos que la guerra en Gaza podría prolongarse hasta bien entrado el 2025, con riesgos de que se expanda a otros frentes.
Esto, además de las pérdidas humanas, podría provocar un gasto militar significativo, destrucción de infraestructura y un impacto duradero en la actividad económica y la inversión, lo cual conduciría a un mayor deterioro de los indicadores crediticios de Israel”.
Otros factores que contribuyen a la rebaja incluyen la “diversidad política, la política de coalición y los imperativos militares” de Israel, que, según Fitch, ponen en riesgo las nuevas medidas de consolidación fiscal.
Con esta decisión, Fitch se convierte en la tercera gran agencia crediticia en rebajar la calificación de Israel, después de S&P y Moody’s.
Cabe recordar que en abril, Fitch había retirado a Israel de la “calificación crediticia negativa”, manteniendo su calificación A+, pero con una perspectiva negativa, citando la incertidumbre en torno a la duración y magnitud de la guerra con el grupo terrorista Hamás y su impacto en la deuda del gobierno.