Indonesia, sexto mayor exportador mundial de gas natural licuado (GNL), ha solicitado a sus compradores aceptar retrasos en las entregas de GNL este año, debido a su enfoque en satisfacer el creciente consumo interno de gas y energía. Según fuentes citadas por *Bloomberg*, esta medida refleja un cambio en la política energética del país.
En 2024, Indonesia habría exportado alrededor de 300 cargamentos de GNL, según datos de seguimiento de buques recopilados por *Bloomberg*. Sin embargo, el gobierno está priorizando la exploración y producción de gas para uso doméstico. El ministro de Energía, Bahlil Lahadalia, señaló recientemente que la demanda de gas natural para generación eléctrica aumentará en los próximos años. “La prioridad es satisfacer la demanda interna. Si no se cumple, no permitiremos exportaciones”, aseguró Lahadalia.
Adicionalmente, el proyecto de GNL Tangguh, operado por BP en Papúa Occidental, enfrentó interrupciones en noviembre debido a un corte eléctrico, lo que afectó temporalmente su producción. Según el regulador indonesio SKK Migas, esta semana también se registró un viaje en el tercer tren de la instalación.
La reducción de las exportaciones indonesias podría restringir aún más el mercado global de GNL, especialmente en un momento crítico para Europa. Con reservas de gas agotándose más rápido que en los últimos siete años, Europa necesita reforzar su suministro de GNL para afrontar el invierno actual y preparar los almacenamientos para el invierno 2025/2026.
En este contexto, los comerciantes han redirigido cargamentos estadounidenses inicialmente destinados a Asia hacia Europa, donde los precios del gas son más altos. Según datos de ICIS citados por el *Financial Times*, al menos siete cargamentos de GNL provenientes de Estados Unidos han modificado sus rutas en el Atlántico Sur este mes, dirigiéndose a terminales europeas en respuesta a la elevada demanda invernal y la interrupción del suministro ruso a través de Ucrania.