En medio de los intensos disparos de cohetes provenientes de la Franja de Gaza, que continúan afectando el sur y el centro de Israel, el país ha tomado la decisión de cerrar temporalmente el yacimiento de gas natural marino de Tamar.
Esta medida ha sido anunciada por el Ministerio de Energía en un comunicado, en respuesta a la necesidad de garantizar la seguridad y estabilidad de su suministro energético en medio de un contexto de conflicto.
El yacimiento de Tamar desempeña un papel crucial en la matriz energética de Israel, siendo una fuente vital de gas natural que abastece a las centrales eléctricas del país. La interrupción de su suministro ha llevado a las autoridades de defensa a tomar medidas para asegurar que las necesidades energéticas de la economía se mantengan cubiertas, recurriendo a combustibles alternativos.
El ministro de Energía declaró que “la industria eléctrica se está preparando para utilizar combustibles alternativos para alimentar sus centrales”, subrayando la importancia de garantizar la continuidad del suministro eléctrico en medio de la situación actual.
Los suministros de gas de Tamar son transportados a la ciudad de Ashkelon a través de un gasoducto submarino, lo que hace que su cierre temporal sea una medida significativa que impacta en la infraestructura energética del país.
Esta decisión se produce en un momento de alta tensión, con ataques de cohetes dirigidos por grupos terroristas en la Franja de Gaza hacia ciudades del sur y el centro de Israel. Además, Israel ha declarado formalmente el estado de guerra después de un ataque masivo del grupo terrorista Hamás, que ha cobrado la vida de un gran número de personas.
Chevron, un gigante energético estadounidense, confirmó que los socios del yacimiento de Tamar han recibido instrucciones de suspender la producción. Chevron posee una participación del 25 % en este yacimiento, con otros socios que incluyen a Isramco, Mubadala Energy, Tamar Petroleum, Dor Gas y Everest.
En los últimos años, las operaciones de gas natural en Israel han sido cruciales para su independencia energética en una región con escasos recursos naturales. El yacimiento de Leviatán, el más grande de Israel, ha estado operando desde finales de 2019 y hasta ahora no ha detenido su producción.
El Ministerio de Energía de Israel ha expresado su compromiso en garantizar la continuidad funcional del sector energético, trabajando en coordinación con diversos organismos y ministerios competentes, mientras monitorea de cerca los acontecimientos en el país y se prepara para diferentes escenarios.
Además, Israel ha estado exportando gas desde el campo Tamar a Jordania desde 2017 y el campo Leviatán ha comenzado a exportar gas a Egipto desde enero de 2020, lo que ha tenido un impacto significativo en la economía de la región.
En agosto, Israel aprobó la expansión de las exportaciones de gas natural a Egipto desde el yacimiento de Tamar, lo que se espera que aumente la producción de gas natural en un 60 % a partir de 2026.
Chevron también ha firmado acuerdos con la empresa estatal Egyptian Gas Holding Company (EGAS) para explorar la cooperación en el transporte, importación, licuefacción y exportación de gas natural del Mediterráneo oriental a Egipto, lo que destaca la importancia estratégica de la industria energética en la región.