La Oficina del primer ministro de Israel está promoviendo un embargo a la importación de bienes turcos, informaron los medios hebreos el miércoles.
El martes por la noche, varios ministros recibieron un proyecto de resolución que detalla que esta medida es una respuesta al boicot comercial contra Israel anunciado por el presidente turco Recep Tayyip Erdogan en mayo, según informaron Calcalist, The Marker y Walla.
Desde entonces, Israel se ha visto obligado a importar productos turcos a través de terceros países. Sin embargo, las exportaciones turcas a la Autoridad Palestina siguen permitidas, lo que, según el proyecto, infringe los acuerdos aduaneros bilaterales.
El documento advierte que “las acciones unilaterales de Turquía podrían sentar un precedente para otros países y dañar la seguridad nacional de Israel, especialmente en un momento en que el Estado de Israel está en guerra”. También señala que “la violación podría dañar la economía de Israel debido a la integración entre los mercados israelí y palestino”.
De aprobarse, la prohibición se aplicaría exclusivamente a las importaciones procedentes de Turquía, sin afectar los productos fabricados en Turquía e importados de otros lugares. Actualmente, la medida está en discusión por un equipo de funcionarios de la PMO y de los ministerios de Economía, Relaciones Exteriores y Finanzas, según Calcalist.
El comercio entre Israel y Turquía alcanzó los 6.200 millones de dólares en 2023, con importaciones desde Turquía por valor de 4.600 millones y exportaciones israelíes a Turquía de 1.600 millones de dólares. No obstante, los funcionarios interministeriales advirtieron que imponer un embargo podría violar las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), ya que Israel carece de fundamentos suficientes para justificar el boicot.
Recep Tayyip Erdogan declaró que el boicot a las importaciones israelíes era una muestra de solidaridad con los palestinos en Gaza, donde Israel está en conflicto con Hamás tras el ataque terrorista del 7 de octubre, en el que murieron unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y 251 fueron secuestradas.
Los funcionarios señalaron que si Israel es encontrado en violación de las normas de la OMC, podría enfrentar sanciones y otros países podrían detener las importaciones desde Israel. Gilit Rubinstein, jefe de la Federación de Cámaras de Comercio de Israel, advirtió que “cualquier decisión del gobierno influirá directamente en el costo de vida”, señalando que los importadores enfrentan aumentos de precios del 10% al 30%.
En respuesta a Calcalist, la PMO negó estar promoviendo un embargo total a las importaciones turcas, aclarando que “el equipo interministerial encabezado por la PMO está debatiendo varias alternativas posibles para gestionar las relaciones comerciales con Turquía debido a las violaciones unilaterales y las medidas discriminatorias adoptadas por Turquía contra Israel”.