Altos funcionarios advierten sobre los riesgos económicos derivados del aumento del déficit, los costos de la deuda y la incertidumbre generada por la guerra en curso.
Funcionarios financieros advierten sobre el déficit y sus peligros
Funcionarios del Ministerio de Finanzas han advertido del incremento de los costos relacionados con las tasas de interés, provocado por la incertidumbre económica, la guerra y el incumplimiento del presupuesto estatal. Afirmaron que aumentar el marco presupuestario “podría ser peligroso para la economía y una señal negativa para los inversores”.
El Comité de Finanzas de la Knéset discutió hoy la falta de 3.500 millones de NIS en el presupuesto de 2024 debido a los gastos para apoyar a los evacuados, sin medidas compensatorias como recortes o incrementos de impuestos para financiarlo. Los funcionarios presentaron advertencias y perspectivas pesimistas sobre el impacto de esta situación.
Yogev Gradus, comisario de presupuesto, expresó que el país está en una situación excepcional. Señaló que el crecimiento económico es débil y que la guerra afectó los niveles de crecimiento tanto en 2023 como en 2024, con un impacto que podría empeorar. Gradus destacó que la debilidad del PIB y la dependencia del consumo público para sostener el crecimiento no es sostenible a largo plazo.
El déficit aumenta y supera el 8% del PIB en 2023
Gradus detalló que el déficit de 2023 alcanzó niveles casi cuatro veces mayores de lo previsto, y se espera que para 2024 esta cifra sea seis veces superior. Este déficit ha sobrepasado los 160.000 millones de shekels, representando el 8,3% del PIB, un nivel muy elevado que podría reducirse hacia finales de año, aunque sin tener en cuenta los efectos de la guerra.
La situación es aún más complicada debido al elevado costo de la deuda. Con el aumento de las tasas de interés globales y la desconfianza de los inversores hacia Israel, la deuda pública se enfrenta a un interés elevado. El Ministerio de Finanzas se está preparando para una posible segunda rebaja de la calificación por parte de Moody’s, lo que encarecería aún más el servicio de la deuda.
Gradus advirtió que el diferencial de rendimiento de los bonos israelíes respecto a los estadounidenses ha aumentado, lo que encarece aún más el endeudamiento. Las agencias calificadoras han rebajado la nota de Israel, lo que incrementa los costos de interés de la deuda.
Los costos de la deuda aumentan y el mercado muestra mayor pesimismo
Según Gradus, los costos de interés previstos para 2025 aumentarán en 7.000 millones de NIS, debido a la guerra y la situación económica. Esta deuda más cara ya es evidente en el presupuesto de 2024, donde los costos de deuda han aumentado en 3.800 millones de NIS.
Este escenario ha generado tensiones entre Gradus y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich. Gradus ha insistido en la necesidad de realizar recortes para evitar un aumento excesivo de la deuda y no comprometer la confianza de los inversores. Sin embargo, Smotrich ha presionado para ampliar el presupuesto en función de los ingresos fiscales.
Gradus hizo un llamado a la Knéset para que actúe con responsabilidad, evitando aprovechar la brecha presupuestaria más allá de lo necesario. El comisario subrayó que es crucial adoptar medidas de ajuste, como recortes de gastos y aumentos de impuestos, para mantener la estabilidad económica.
El presupuesto de 2025 requiere ajustes fiscales urgentes
Para Gradus, uno de los indicadores clave para medir la resiliencia económica de Israel es la relación deuda/PIB. Mantener esta relación lo más baja posible es fundamental para que el país pueda responder eficazmente a las crisis futuras.
Gradus explicó que en los últimos años Israel ha logrado mantener una relación deuda/PIB aceptable, lo que ha permitido enfrentar diversas crisis con éxito. En ese sentido, destacó la importancia de volver a esta estabilidad lo antes posible, a pesar de los desafíos actuales.
Las agencias calificadoras internacionales también han reconocido el esfuerzo de Israel por mantener bajo control esta relación, lo que ha sido clave para generar confianza en los mercados financieros. A pesar de las dificultades generadas por la guerra, las autoridades económicas insisten en que seguirán tomando medidas para asegurar la recuperación del equilibrio fiscal.