Tomar decisiones en un entorno de incertidumbre es complicado. En Israel, los contratos de alquiler de oficinas suelen tener una duración de tres a cinco años, pero actualmente el mercado se encuentra en una situación donde se evitan compromisos a largo plazo.
“La mayoría de las empresas prefieren mantener sus espacios actuales y renovar contratos por períodos cortos de uno o dos años”, comenta Guy Amosi, CEO de Avison Young Israel, una firma de consultoría y gestión inmobiliaria.
Amosi señala que la crisis en el sector de oficinas está influenciada tanto por factores globales como locales. La reducción de personal en empresas tecnológicas ha dejado espacios vacíos, a pesar de los nuevos proyectos en construcción.
Inmuebles de Primer Nivel
En los últimos meses, muchas startups y empresas tecnológicas han disminuido su actividad, afectando el mercado de oficinas. Según Amosi, “hace tres años, las empresas buscaban mejorar la experiencia de sus empleados mudándose a nuevas oficinas, pero ahora solo lo hacen si es absolutamente necesario”. La situación de incertidumbre, exacerbada por la guerra, ha detenido los movimientos drásticos.
El pasado domingo, en una entrevista con el periódico Globes, Amosi comentó sobre las dificultades actuales: “Esta mañana nos despertamos con un ataque preventivo contra Hezbolá. ¿Cómo se toman decisiones en un contexto así? Desde la reforma judicial hasta la guerra, el mercado está paralizado y los inquilinos no saben cómo proceder”.
Construcción en Progreso
Amosi también mencionó que es complicado para los promotores tomar decisiones, especialmente aquellos que están construyendo nuevas torres de oficinas en Tel Aviv, como Mivne Real Estate y Amot, entre otros.
Estos edificios, que se están construyendo bajo estándares LEED Platinum, son de los más altos niveles a nivel mundial, pero aún no están completos. A pesar de su calidad y ubicación estratégica, la falta de crecimiento en el sector tecnológico ha dejado muchos espacios vacíos.
Amosi expresa su esperanza en que, tras la guerra, habrá un repunte económico que beneficiará al sector de oficinas. “La historia muestra que después de una guerra, vienen buenos tiempos para todos, incluyendo el sector de oficinas”, afirma.
Subarrendamientos y Precios Bajos
Amosi confirma que han recibido numerosas consultas sobre subarrendamientos. Muchas empresas, que habían alquilado grandes espacios hace unos años, ahora buscan reducir costos ofreciendo subarrendar parte de sus oficinas, especialmente en zonas clave de Tel Aviv.
Un ejemplo destacado por Globes es el caso de las Torres Da Vinci, donde el precio de alquiler cayó de 160 a 70 shekels por metro cuadrado. Sin embargo, Amosi aclara que estos precios son excepcionales, con la mayoría de los nuevos edificios en Tel Aviv manteniéndose en 130 NIS por metro cuadrado para oficinas sin acabados.
Empresas como Azrieli y Amot, que controlan una gran parte del mercado, están mejor preparadas para soportar las fluctuaciones, a diferencia de pequeños inversores que pueden verse obligados a bajar los precios para llenar sus espacios vacíos.
Dificultades Fuera de Tel Aviv
Fuera de Tel Aviv, hay millones de metros cuadrados vacíos en lugares como Petah Tikva, Kfar Saba y Rishon Lezion. Proyectos como BSR City en Petah Tikva, que llevan dos años en marcha, aún tienen grandes áreas sin ocupar. Empresas como Amdocs, que construyeron grandes campus en Ra’anana, ahora están reduciendo personal y espacios, creando oportunidades para quienes buscan subarrendamientos.
Oportunidades Emergentes
A pesar de la crisis, Amosi destaca que sectores como la defensa y la inteligencia artificial están en crecimiento, ofreciendo oportunidades en medio de la incertidumbre.