Moody’s Investors Service ha disminuido la calificación crediticia de los cinco principales bancos de Israel, asignándoles una perspectiva negativa. Esta decisión se fundamenta en la preocupación de un “posible debilitamiento adicional de la capacidad del Estado para prestar apoyo” en medio de la guerra en curso con el grupo terrorista Hamás.
La agencia de calificación crediticia estadounidense ha reducido en un escalón las calificaciones de depósitos a largo y corto plazo de Bank Leumi Le-Israel, Bank Hapoalim, Mizrahi Tefahot Bank Ltd., Israel Discount Bank Ltd., y First International Bank of Israel Ltd. (FIBI), pasando de A2 a A3.
Según Moody’s, esta rebaja responde a “la menor mejora de las ayudas públicas incorporada a estas calificaciones debido a la rebaja de la calificación soberana de Israel”. Esta medida se tomó tras la disminución de la calificación crediticia soberana de Israel el viernes anterior, la cual también se ajustó a A2 con una perspectiva “negativa”. La agencia señaló que “el actual conflicto militar con Hamás, sus secuelas y consecuencias más amplias elevan materialmente el riesgo político para Israel, además de debilitar sus instituciones ejecutivas y legislativas y su fortaleza fiscal, en un futuro previsible”.
La perspectiva “negativa” sobre la calificación de los depósitos a largo plazo de los bancos refleja el “potencial de un impacto significativamente más negativo sobre la economía en caso de una escalada del conflicto en curso, que podría llevar a que los fundamentos autónomos de los bancos se vieran afectados más gravemente de lo que se supone actualmente”.
No obstante, Moody’s recalca su expectativa de “una probabilidad muy alta de apoyo gubernamental a los cinco grandes grupos bancarios israelíes, que califica, dada su importancia sistémica y la práctica arraigada del Gobierno israelí de apoyar a dichos bancos de importancia sistémica, en caso de necesidad”.