El jueves se inauguró una nueva línea de tren que conecta Modiin con Jerusalén, con una duración de viaje de solo 22 minutos.
La línea funcionará desde Modiin-Maccabim-Reut todos los días laborables, incluidos los viernes, y los sábados por la noche, comenzando con un servicio por hora, con planes de aumentar a dos servicios por hora en cada dirección.
El proyecto conecta Modiin con la línea de alta velocidad a Jerusalén y ha supuesto la construcción de 5,2 kilómetros de vía electrificada, tres puentes y un túnel de 650 metros de longitud. Se ha ampliado la estación de Modiin y se han mejorado los accesos para animar a los viajeros a utilizar la nueva conexión.
Además, a partir del 1 de abril, la línea eléctrica entre Jerusalén y Herzliya empezará a funcionar los viernes, con un tren por hora en cada dirección. Se ampliarán y extenderán los servicios en la línea entre Modiin y Tel Aviv, incluyendo la circulación de trenes los sábados por la noche.
La ministra de Transportes, Merav Michaeli, declaró que su oficina se compromete a acelerar los proyectos de electrificación de las vías y de mejora de los servicios de transporte público.
La ampliación de los servicios está pensada para fomentar un mayor uso del transporte público en lugar de los vehículos privados, según el anuncio.

El alcalde de Jerusalén, Moshe Leon, describió la inauguración del jueves como parte de una “verdadera revolución social y medioambiental” que está trabajando para conectar los trenes interurbanos con los servicios de tren ligero en toda la ciudad y las rutas de autobús de mayor frecuencia.
Mientras tanto, los retrasos que afectan a la construcción del esperado tren ligero de Tel Aviv harán que su inauguración se produzca como muy pronto a mediados del año que viene, según la NTA Metropolitan Mass Transit System, la empresa gubernamental que desarrolla la red de transporte de masas de Tel Aviv.
El retraso se produce después de que el año pasado las autoridades retrasaran la inauguración de agosto de 2022 a noviembre de 2022.
El atasco se debe tanto a los retrasos en la finalización de algunas estaciones como a los problemas del sistema de señalización. El sistema controla la circulación y el horario de los trenes en toda la red, que consta de 34 kilómetros de vías y 34 estaciones.
La Línea Roja, que irá de Petah Tikva al sur de Bat Yam pasando por Tel Aviv, es la primera de las tres líneas de tren ligero previstas, que incluirán tramos subterráneos, junto con la propuesta de añadir tres líneas de metro.
Se espera que el sistema alivie significativamente la congestión del tráfico en el corazón financiero y cultural de Israel, que tiene pocas opciones de transporte público más allá de los autobuses, los taxis compartidos y un tren de cercanías interurbano.
Cuando esté terminada, la red de metro y tren ligero cubrirá toda el área metropolitana de Tel Aviv con 240 kilómetros de vías y cientos de estaciones, uniendo Ra’anana y Kfar Saba al norte de la ciudad, con Rishon Lezion y Rehovot al sur, así como Lod, Ramle, el aeropuerto Ben Gurion y todos los puntos intermedios.
Está previsto que las seis líneas proyectadas se completen en algún momento de la próxima década, con un coste de 18.000 millones de NIS y más. Es el mayor proyecto de infraestructuras de la historia de Israel.