La economía israelí mostró una expansión vigorosa entre julio y septiembre de 2025, con un incremento del producto interior bruto del 12,4% en tasa anualizada respecto al trimestre anterior, según el primer estimado publicado el domingo 16 de noviembre por la Oficina Central de Estadística.
El resultado superó el pronóstico medio de una expansión cercana al 8%, según datos de agencia. Este repunte siguió a la contracción registrada entre abril y junio, cuando el segundo estimado oficial del 16 de septiembre confirmó una caída anualizada del 4,0% frente al trimestre previo, tras una primera lectura de agosto que había estimado un descenso del 4,3%.
El aumento del tercer trimestre se explicó por avances en los principales componentes de la demanda interna y externa. El gasto de los hogares creció un 23,0% anualizado, mientras la formación bruta de capital fijo aumentó un 36,9%. Las exportaciones totales de bienes y servicios subieron un 23,3% y el consumo del sector público se elevó un 4,4%, con un incremento del PIB per cápita del 10,8%.
El organismo estadístico destacó el repunte del consumo privado como uno de los motores del trimestre, con una expansión del 23,0% anualizada. Por habitante, el consumo privado avanzó un 21,3% anualizado y el gasto corriente de los hogares aumentó un 17,3%. Estos resultados siguieron a la caída del 4,4% anualizada de la demanda privada observada en el segundo trimestre según la revisión de septiembre.
La inversión registró un crecimiento notable, con una formación bruta de capital fijo que aumentó un 36,9% anualizada entre julio y septiembre. Los datos divulgados por la oficina estadística y medios económicos atribuyen parte del incremento a un mayor gasto en maquinaria y equipo. La inversión residencial subió un 32,1% anualizada y la no residencial y de obras un 11,0%. No obstante, las cifras interanuales muestran que la inversión en construcción sigue por debajo del nivel de julio-septiembre de 2023.
El sector externo contribuyó positivamente al crecimiento, con exportaciones de bienes y servicios en aumento. El primer estimado situó el alza total en un 23,3% anualizada, mientras que las exportaciones sin diamantes ni empresas emergentes crecieron un 18,9%. En detalle, las exportaciones manufactureras sin diamantes subieron un 29,2% anualizada y las de servicios un 9,9%, con un incremento del 4,6% en los servicios distintos del turismo y las firmas emergentes. Estas variaciones contrastaron con las caídas del segundo trimestre, cuando la revisión de septiembre reflejó un descenso anualizado del 2,9% en las exportaciones sin diamantes ni start-ups.
Las importaciones también se incrementaron de forma significativa. El total de bienes y servicios importados subió un 16,5% anualizada, tras un 8,0% en el trimestre anterior. Las importaciones de servicios sin turismo aumentaron un 3,3% anualizada y las de servicios turísticos un 26,9%, lo que elevó el total de servicios importados un 7,6%. Las importaciones de bienes civiles crecieron un 45,5% anualizada, y si se excluyen defensa, buques, aeronaves y diamantes, el conjunto de bienes y servicios importados avanzó un 38,6%.
El gasto público contribuyó con un aumento del 4,4% anualizada. Según el desglose del primer estimado, el consumo civil del gobierno subió un 15,6% anualizada, mientras que el gasto corriente en defensa descendió un 20,1%. Todos los porcentajes fueron expresados en términos desestacionalizados y anualizados frente al trimestre inmediato anterior.
En la comparación interanual, el PIB de julio a septiembre de 2025 se situó un 3,5% por encima del mismo periodo de 2024, según el primer estimado. En esa medida, la oficina reportó un aumento del 3,6% en el producto del sector empresarial, del 3,3% en el consumo privado, del 9,4% en la formación de capital fijo y del 6,6% en las exportaciones totales.
El repunte del tercer trimestre contrastó con la debilidad de abril a junio. El segundo estimado oficial del 16 de septiembre registró una contracción anualizada del 4,0% en el PIB frente al primer trimestre, con descensos del 6,9% en el producto empresarial, del 4,4% en el consumo privado, del 12,7% en la inversión en activos fijos y del 2,9% en exportaciones sin diamantes ni empresas emergentes. Esa estimación sustituyó la lectura inicial del 17 de agosto, que había calculado una caída del 4,3%.
El calendario oficial de publicaciones de la Oficina Central de Estadística incluyó el primer estimado de las cuentas nacionales del tercer trimestre el domingo 16 de noviembre y prevé una revisión con un segundo estimado en diciembre, conforme al procedimiento habitual de actualización con nueva información.
