El sector de la energía eólica marina está siendo afectado por una crisis financiera ante el vertiginoso incremento de los costos de inflación, lo que ha obstaculizado el avance de grandes proyectos de energía limpia.
Importancia de la energía eólica marina y su alta inversión
La energía eólica marina es crucial en la lucha contra el cambio climático, pero sus costos de implementación son significativamente superiores a los de su contraparte terrestre. Esto se debe en gran medida a las características intrínsecas de los aerogeneradores marinos, que superan en tamaño a los rascacielos y su operación en condiciones marítimas.
Se estima que el potencial de la energía eólica marina en las costas de Estados Unidos alcanza los 4,2 teravatios, casi cuádruple la capacidad total actual de generación de energía. No obstante, el problema financiero es significativo, ya que la eólica marina cuesta entre dos y cinco veces más que la eólica terrestre.
El aumento en los costos de componentes y mano de obra, junto con las tasas de interés, son algunos de los factores que han incrementado en un 57 % los gastos asociados a los proyectos offshore estadounidenses desde 2021.
La energía eólica marina se ve amenazada por cancelaciones
En julio, se reportó un número alarmante de acuerdos de energía eólica marina cancelados, ocasionando miles de millones de dólares de gastos previstos eliminados. Entre las empresas afectadas se encuentran Iberdrola SA, Orsted A/S y Vattenfall AB.
Estos proyectos cancelados podrían haber suministrado 3,5 gigavatios de energía, más del 11 % de la flota eólica marina desplegada actualmente en aguas de Estados Unidos y Europa. Se estima que otros 9,7 gigavatios adicionales de proyectos eólicos marinos en Estados Unidos están en riesgo de cancelación.
El desafío de financiar la energía eólica marina
La energía eólica marina ha experimentado un incremento en los costos, contrariamente a la tendencia de disminución de precios en las energías renovables desde 2008. Por ende, la inversión en este sector se percibe como un proyecto gubernamental, en lugar de privado.
A pesar de estos retos, la administración Biden mantiene su meta de alcanzar 30 gigavatios de capacidad de energía eólica marina para 2030. Recientemente se anunciaron tres nuevas zonas de energía eólica en las costas de Delaware, Maryland y Virginia, pero persisten interrogantes sobre la financiación de estos proyectos.
Perspectivas futuras de la energía eólica marina
La meta de 30 gigavatios para 2030 parece cada vez más improbable. Hasta la fecha, solo se ha logrado cerca del 0,1 % de ese objetivo, y hasta un tercio de los proyectos previstos están actualmente en litigio.
La energía eólica marina es esencial para alcanzar los objetivos climáticos a largo plazo, pero enfrenta desafíos económicos significativos en el corto plazo. El principal reto será hallar soluciones a las complicaciones financieras que actualmente atenazan al sector.