La startup israelí Xtend ha sido señalada por medios de comunicación como fabricante del dron que rastreó y filmó al líder de Hamás Yahya Sinwar en octubre pasado. Aviv Shapira, cofundador y director ejecutivo de la empresa, no confirmó esta información, pero declaró que su compañía suministra drones de interior al ejército israelí. Estos dispositivos, controlados remotamente desde hasta 9.000 kilómetros, utilizan inteligencia artificial para realizar ataques precisos con mínima intervención humana.
El Ministerio de Defensa y las Fuerzas de Defensa de Israel no hicieron comentarios sobre el equipo utilizado en el ataque contra Sinwar.
La proliferación de startups de tecnología militar no es exclusiva de Israel. En Ucrania, empresas emergentes han desarrollado equipos que han sido cruciales para contrarrestar las fuerzas rusas. Isaac Ben-Israel, experto militar, subrayó que estas empresas destacan por su capacidad de crear soluciones en semanas, lo que resulta vital en contextos bélicos.
Israel, con una escena tecnológica robusta, ha visto cómo varias startups obtienen contratos internacionales y aseguran financiación. Xtend, por ejemplo, firmó un acuerdo con el Ministerio de Defensa, recaudó 40 millones de dólares en agosto y concretó un contrato de 8,8 millones de dólares con el gobierno estadounidense.
Shawn Mcguire, socio del fondo Sequoia Capital, señaló que la experiencia adquirida durante la guerra impulsa las inversiones tecnológicas. La alta tecnología, que representa el 16% del empleo y más del 50% de las exportaciones de Israel, es un pilar fundamental en la economía del país.
Shapira relató cómo, el 7 de octubre de 2023, suspendió sus planes personales tras oír las sirenas de cohetes desde Gaza. En pocas horas, Xtend desplegó una flota de drones para asegurar edificios, ilustrando la rapidez de respuesta ante emergencias.
Nir Weingold, jefe de planificación de la Dirección de Investigación y Desarrollo de Defensa, indicó que el Ministerio de Defensa ha colaborado con startups mediante una “vía verde”, que agiliza procesos para apoyar el esfuerzo bélico. Desde el 7 de octubre hasta finales de 2024, 101 empresas emergentes han recibido contratos por 782 millones de shekels (219 millones de dólares). Más de 25 de estas empresas han pasado del desarrollo a la producción, contribuyendo con el 50% de la tecnología antidrones utilizada durante la guerra.
La primera conferencia Global DefenseTech, organizada por el Ministerio de Defensa y la Universidad de Tel Aviv, reunió a nuevas empresas tecnológicas y atrajo el interés de grandes multinacionales. Ayal Somech, de Boeing Israel, afirmó que Israel es un socio clave en tecnología de defensa.
La amenaza de drones provenientes de Gaza, Líbano, Irán y Yemen ha planteado desafíos significativos. Thirdeye Systems, especializada en sistemas de alerta para drones de ataque, informó que su negocio se expandió durante la guerra, aumentando de tres a siete líneas de productos y logrando contratos importantes. El martes, la empresa anunció la venta del 30% de sus acciones al conglomerado emiratí EDGE por 10 millones de dólares, marcando una inversión pública poco común entre Emiratos Árabes Unidos e Israel.
Esta inversión permitirá a Thirdeye ampliar su alcance internacional, aunque está sujeta a la aprobación del Ministerio de Defensa.