Quora es un sitio web en el que su comunidad de usuarios formula y responde preguntas. Un hombre que trabaja en Silicon Valley preguntó: “¿Por qué es tan difícil trabajar con israelíes? Conozco a tres o cuatro israelíes. Uno es muy inteligente y los otros dos son muy buenos vendedores, pero es muy difícil trabajar con ellos. ¿Por qué? ¿Otros han tenido la misma experiencia con los israelíes? ¿Por qué es tan difícil trabajar con ellos?”.
Creo que después de leer los 5 consejos que aparecen a continuación, los empresarios ya no se sentirán igual que el hombre que expresó toda esa frustración en línea.
He desgranado algunas de las cosas más importantes que hay que recordar cuando se trabaja con israelíes:
1. No se lo tome como algo personal
Los israelíes tienen opiniones y emociones fuertes, y no tienen miedo de mostrártelas. Pueden gritar o incluso parecer enfadados, y estas tendencias les acompañan hasta el lugar de trabajo: en las reuniones de negocios, en las entrevistas de trabajo e incluso en los correos electrónicos. Es parte de su norma cultural. Así que no te lo tomes como algo personal. Y trata de aceptar su estilo de comunicación sin juzgarlo ni sentirte insultado. Porque, al fin y al cabo, los israelíes no intentan ofenderte, solo quieren que les escuches. Incluso puedes ponerlo en este contexto: La emotividad y la argumentación israelí también indican un gran interés y entusiasmo por el tema, así como por tus opiniones.
2. Construir una relación
Los israelíes tienden a acercarse y entrar en tu espacio personal. Y esta invasión de la intimidad puede notarse también en un sentido metafórico. Porque los israelíes suelen hacer preguntas desprevenidas sobre tu familia, tu situación sentimental e incluso tu salario. Fíjese que también comparten con usted: ¡es una calle de doble sentido! Si se siente incómodo en estas situaciones, intente recordar que los israelíes construyen la confianza estableciendo relaciones. Y a través de estas preguntas personales solo intentan conocerte mejor y establecer su conexión comercial contigo basándose en la amistad o, al menos, en una sólida base de familiaridad. Así que te recomiendo que respondas de forma amistosa y directa a estas preguntas, tanto si les proporcionas toda la información que buscan como si no, ya que el diálogo es importante para una futura colaboración.
3. Siga la corriente
Los israelíes son creativos e innovadores, por lo que prefieren dejar espacio para los cambios espontáneos cuando llevan a cabo sus negocios y trabajan en proyectos. Se adaptan fácilmente a esos cambios. Esta actitud de ir con la corriente puede confundir a menudo a los no israelíes, que están acostumbrados a ceñirse a una agenda más rígida. Le recomiendo que intente estar más abierto a los cambios que se produzcan en el camino, para beneficiarse de las mejoras que puedan surgir, y no frustrarse por la actitud poco rigurosa de los israelíes respecto a los planes y calendarios previamente acordados. Sin embargo, también te aconsejo que desgloses el proyecto en etapas claramente ordenadas y que mantengas a los israelíes bien informados de ellas, de modo que cualquier cambio que pueda surgir pueda ser supervisado y discutido antes de pasar a la siguiente etapa. El objetivo es compensar el esfuerzo por aplicar la estrategia prevista con la suficiente flexibilidad para adaptarse a la evolución.
4. Mantenlo casual
La cultura israelí es en su mayoría muy casual. Los israelíes crecen llamando a sus profesores por su nombre de pila. E incluso se refieren al Primer Ministro Benjamin Netanyahu por su apodo: “Bibi”. Es posible que los israelíes no lleven traje y corbata a una entrevista de trabajo. Le recomiendo que intente aceptar su informalidad, y no se sorprenda si no observan las reglas de jerarquía a las que no están acostumbrados. Pero trate de no confundir su informalidad con falta de profesionalidad. Si dirige un equipo de israelíes, le recomiendo también que haga descender el poder en la organización. Esto motivará a tus empleados israelíes y también hará que te respeten, por confiar en ellos y desafiarlos.
5. Aprovechar el multiculturalismo
Los israelíes se atreven a soñar en grande y están dispuestos a correr riesgos para alcanzar sus sueños. Aunque sus objetivos puedan parecer a veces poco realistas, los israelíes prefieren apuntar alto y fracasar que sentir que no se han esforzado lo suficiente. Sin embargo, en su camino hacia el éxito, los israelíes no siempre prestan suficiente atención a los detalles y a la planificación estratégica a largo plazo. Así que intente recordar todo esto cuando haga negocios con israelíes, y disfrute de la posibilidad de que su riesgo y su ambición den sus frutos. Al mismo tiempo, también le recomiendo que aproveche los valiosos activos de su propia cultura que pueden servir de factor de equilibrio. Si sabes qué ventajas puedes tomar de cada cultura, en realidad posibilitas una colaboración en la que el todo es mayor que la suma de sus partes.
Ser culturalmente inteligente significa integrar la conciencia con la voluntad de escuchar a los demás y aprender de ellos, sin juzgar lo correcto o lo incorrecto. Y esa es la clave del éxito empresarial global en el mundo moderno.